Moscú comenzó la entrega del sistema antiaéreo avanzado durante el fin de semana, a pesar de las objeciones de Israel

A lo largo de la última semana, Rusia ha estado entregando sus avanzados sistemas antiaéreos, S-300, a Siria y ha estado utilizando el Antonov An-124 Ruslan de fabricación rusa para el trabajo.

Los aviones, utilizados por la Fuerza Aérea rusa así como por varios operadores de carga, fueron vistos por aficionados que rastrean los movimientos de los aviones (también conocidos como observadores de aviones) en la ruta Rusia-Siria en los últimos días, según el periódico en lengua hebrea israelí Ynet.

Rusia ha afirmado que comenzó a suministrar el sistema de defensa aérea S-300 a Siria el viernes, a pesar de las protestas israelíes. El primer avión de carga fue visto llegando a la base aérea de Hmeimim cerca de Latakia el jueves por la noche, según el informe de Ynet.
El ministro ruso de Asuntos Exteriores, Sergei Lavrov, afirmó que las entregas habían comenzado durante una conferencia de prensa en la ONU, agregando que el sistema antiaéreo “se dedicará a garantizar el 100 por cien de la seguridad de nuestros hombres en Siria”.

La decisión de Moscú de suministrar los sistemas a Siria ha causado preocupación en Jerusalén. Un alto funcionario israelí dijo el sábado que la posesión por parte de Siria del S-300 representa un serio desafío para el estado judío, pero agregó que Israel estaba trabajando para evitar que el desarrollo se convierta en una amenaza importante para la seguridad del país.

“El S-300 es un desafío complejo para el Estado de Israel. Estamos tratando la decisión de diferentes maneras, no necesariamente impidiendo el envío del sistema antiaéreo”, dijo el funcionario.
 Sistema de lanzamiento de misiles S-300 

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, criticó el viernes la medida de Rusia como “irresponsable”, pero dijo que Israel estaba comprometido a continua desconfianza con Moscú en sus operaciones militares en la región.

En declaraciones a la cadena CNN en Nueva York después de la Asamblea General anual de la ONU, Netanyahu dijo que habló con Putin a mediados de septiembre después de que las fuerzas sirias respondieran a un ataque aéreo israelí derribando por error un avión de reconocimiento militar ruso, matando a las 15 personas a bordo.

Netanyahu añadió que ambas partes querían evitar un enfrentamiento militar en Siria, y señalando que los muchos militares y otros grupos que operan en la región lo estaban haciendo “muy concurrido allí en este pequeño espacio”.

El Ministerio de Defensa ruso también anunció la semana pasada que comenzaría a interferir los radares de los aviones militares que atacan objetivos en Siria desde la costa del Mediterráneo.

Tanto Israel como Estados Unidos han protestado por la decisión de suministrar a Siria el S-300, lo que podría complicar los actuales esfuerzos para evitar que Irán profundice su presencia militar en Siria y frustrar la transferencia de armas en Siria a Hezbollah.

The Times of Israel