Recientemente habían sido objeto de un acoso severo, incluido el encarcelamiento y amenazas de represalias, antes de que esta oportunidad se presentara como un acuerdo que conviene a ambas partes. Porque esta oportunidad le permite a HTS deshacerse de ellos enviándolos a pelear en Ucrania. Al mismo tiempo, podrían tener una nueva oportunidad y cobrar dinero por su participación en la lucha en ese país. Los salarios podrían alcanzar los 1.200 a 1.500 dólares mensuales, según algunas fuentes. Estas fuentes dijeron a Sputnic Arabic que 150 de los 450 milicianos son de origen francés, belga, chino, marroquí, tunecino, checheno y británico. Mientras que los otros 300 son sirios de las dos gobernaciones de Idleb y Alepo.
La mayoría de estos individuos luchan en las filas de HTS y Ansar al-Tauhid, y un pequeño número pertenece a Failaq al-Sham y al pro-turco Frente de Liberación Nacional. Los milicianos habían sido transportados ese día a la región fronteriza siria de Jerbet Yoz y luego al territorio turco donde se reunieron bajo la supervisión de personas influyentes que, según Sputnik, parecen ser agentes de la inteligencia turca. Desde que llegaron a Ucrania se ha roto el contacto con ellos y nadie sabe a qué regiones serán enviados, concluyen las fuentes de la agencia rusa. . (Source/Photo: Sputnik)
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