Tras una prolongada pausa provocada por el mal tiempo, dos enormes embarcaciones grúa han logrado poner a flote la fragata noruega Helge Ingstad, que se hundió el 8 de noviembre del año pasado al colisionar con un petrolero después de participar en los ejercicios de la OTAN Trident Juncture 2018. (Espejo Aeronáutico 11/08/2018). Las grúas flotantes, con una capacidad de elevación de 4.000 y 3.700 toneladas, llegaron a principios de enero al fiordo de Hjelte, donde se hundió el buque, pero el reflote se tuvo que posponer 39 veces debido a las malas condiciones meteorológicas. El operativo se pudo reiniciar este 24 de febrero, cuando los buzos comenzaron a colocar una 'telaraña' de cables metálicos debajo del casco de la fragata. Según las previsiones, la Helge Ingstad será transportada el fin de semana próximo hasta la base militar de Haakonsvern, situada en Bergen, detalla en un comunicado la Armada Noruega. (Source/Photo: Noruegian Navy)