Este verano, en una zona desértica sin determinar en la que se daban temperaturas de cincuenta y cinco grados centígrados al aire libre, tuvieron lugar unas interesantes pruebas dinámicas para demostrar las capacidades de un nuevo producto de la firma francesa Nexter. Lo que se evaluaba era la segunda generación, conocida con las siglas VBCI-2, de su conocido blindado 8x8, un ingenio que ha sido probado y validado en combate en lugares como Malí, Afganistán o la República Centroafricana.
Concebido ya hace unos años como medio de alta movilidad táctica y estratégica, que protege a quienes transporta contra las amenazas más clásicas y contra minas y artefactos improvisados (IED’s, Improvised Explosive Devices), se han fabricado hasta la fecha, y están en servicio, nada menos que seiscientos treinta de estos vehículos, con unas previsiones de ventas que pueden hacer que pronto se supere la cifra de mil si se concretan propuestas ahora en curso.
Lo que Nexter mostró a quienes estuvimos en la feria británica DSEI, ha sido una plataforma optimizada para las necesidades más recientes de los ejércitos, aportando a aquellos que los emplean buena capacidad combativa en los conflictos asimétricos ahora tan en boga.
Una de las mejoras que se ha introducido, y le confiere un especial “carácter” frente a su homónimo anterior, es la que se refiere a la torre principal de la versión de combate o AFV (Armoured Fighting Vehicle). Ahora cuenta con una nueva torre en la que se incluye un cañón de 40 milímetros de la firma CTA.
Esa pieza aporta ventajas como la tipología de municiones que es capaz de disparar, el tipo de blancos que se pueden combatir con eficiencia -los aéreos, por ejemplo- y su potencia de fuego que le permite perforar blindajes novedosos e incluso ser “contundente” contra carros de combate de anteriores generaciones. En el costado, hay un afuste para dos misiles contracarro que amplían su potencial de utilización, sugiriéndose como opciones tanto el “Javelin” como el novedoso MMP (Missile Moyenne Portée) de MBDA.
Adaptado a una amplia tipología de roles de combate
Se ha optado en el VBCI-2 por mejorar la barcaza en general y su blindaje en particular, generando capacidades contra minas e IED’s que le permiten sobrevivir a explosiones de rango inferior al nivel 4A/4B. Las mejoras, que se implementan en un modelo ya maduro y probado en diversos entornos con buenos resultados, afectan también al rediseño de algunas áreas internas de forma que pueden incorporarse, con más facilidad, nuevas tecnologías que estén disponibles en cuanto a comunicaciones, Mando y Control C4I, o vectrónica. Se recurre a una nueva arquitectura abierta, designada CREWSHARE, que es compatible con los últimos estándares internacionales, como los tipo GVA (Generis Vehicle Arquitectura).
A esos cambios se añaden mejoras en lo que es la relación hombre-máquina, mejorando tanto el confort como la ergonomía de quienes lo tengan a su servicio. Lo reseñado va a aportar, por el uso de más componentes de origen comercial (COTS, Commercial Off The Shelf) o modificados (MOTS, Modified Off The Shelf), una reducción en los costes asociados al ciclo de vida, mejorándose la capacidad de mantenimiento y de introducir futuras actualizaciones.
El VBCI-2 se convierte así en una plataforma más acorde con las necesidades actuales y futuras, y en un ingenio que se adapta mejor a una tipología de roles de combate más amplia. Todo ello, manteniendo una gran movilidad táctica, operacional y estratégica que lo sitúan como modelo flexible que puede moverse junto a los carros de combate, adaptarse a todo tipo de variantes y asumir, con un notable grado de eficacia, distintos tipos de actuaciones, incluso en entornos de alta intensidad.
Sobre sus características, apuntar que se concreta una masa total de 32 toneladas y una capacidad de carga de hasta trece, aunque si se desea puede ampliarse el blindaje hasta nivel 5 y que sea capaz de detener impactos de proyectiles perforantes APFDS de 30mm. Se trata del único 8x8 que recurre a una barcaza fabricada íntegramente en aluminio.
Su motor, un Volvo D13, ha sido mejorado pasando de los 550 caballos que rendía en la variante anterior a conseguir una cifra de 600; otras mejoras afectan a la introducción de zonas flexibles de almacenamiento a ambos lados de la cabina, un sistema de aire acondicionado más potente, asientos rediseñados, puesto de conducción más ergonómico o mejoras como una cámara térmica y visor asociados al conductor.
Segundo Calpena
defensa.com
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