sábado, 1 de septiembre de 2018

Ratnik: esta es la armadura de combate rusa para hacer 'invencibles' a sus soldados

Integrada por varios sistemas inteligentes propulsados por 5 motores internos, este traje que busca convertir a las tropas en 'súpersoldados' estará listo en 2025

Es uno de los grandes objetivos que buscan todos los ejércitos del mundo. Junto con la creación de sistemas de defensa más completos o el desarrollo de drones cada vez más eficaces, la mejora de armaduras, equipamientos y otro tipo de herramientas que permitan convertir a las tropas en 'súpersoldados' es algo con lo que sueña la mayoría de potencias armamentísticas. Muchos trabajan para conseguirlo, pero Rusia intenta tomar la delantera en este aspecto. Su primer intento para conseguirlo es una especie de armadura robótica llamada Ratnik.

Desarrollado por el consorcio estatal Rostec, que engloba a varias compañías y funciona como una especie de DARPA (la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa de Estados Unidos), el 'Ratnik 3: Soldado del futuro' parece un invento de ciencia ficción, pero está más cerca de llegar al campo de batalla de lo que nos imaginamos. Está compuesto por diferentes sistemas, entre los que encontramos materiales que emulan a la piel de los camaleones y permiten un camuflaje inteligente, un casco que ayuda a la labor del soldado ofreciéndole información extra para apuntar al enemigo o comunicarse con sus compañeros y, lo más llamativo y que ya ha sido probado, un exoesqueleto que reduce la fatiga y ofrece más fuerza, rapidez y precisión al usuario que lo lleva.

El traje al completo, del que se lleva hablando desde 2017, fue presentado al público esta semana, aprovechando la feria armamentística celebrada en Moscú, ARMY-2018 (una de las más importantes del sector), con un aspecto tan imponente como llamativo. Se convirtió en uno de los atractivos de la feria que, obviamente, copaban las compañías rusas, pero hasta este lunes el ejército ruso no anunció nada sobre posibles pruebas ni fecha de lanzamiento del traje.

La sorpresa llegó después de que la agencia de noticias rusa TASS publicara que el exoesqueleto, hecho de titanio y que es parte fundamental del Ratnik 3, ya ha pasado su primer test y podría estar listo en muy poco tiempo. ¿En qué consistía esta prueba? Concretamente probaron si un soldado podía disparar un arma pesada con una mano con cierta precisión a distintos objetivos, y todo fue según lo previsto. Aún falta mucho para poner a punto esta herramienta y tiene problemas tan importantes como la ausencia de una batería que permita aprovechar todo el potencial del exoesqueleto, pero sus creadores aseguran que junto al resto de sistemas que componen el traje del 'soldado del futuro', el Ratnik-3 estará operativo para 2025.
De conseguir cumplir dichos plazos, se convertirá en uno de los primeros trajes de este tipo que llegarán al campo de batalla y significará un avance estratégico clave para la infantería rusa, pero como todos estos proyectos, esta armadura también tiene sus puntos oscuros. Hasta el momento solo se ha hablado de prototipos y proyectos, pero como apuntan distintos medios especializados, el montaje de los motores, los 5 sistemas que lleva integrado el traje y los casi 59 componentes que maneja convierten a este invento en un artilugio tan caro que sería imposible repartirlo entre todas las tropas. Veremos que pasa finalmente con este Ratnik-3 pero la verdad que impresiona solo con verlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario