Los soldados estadounidenses de Fort Hood están probando un nuevo Vehículo Blindado Multipropósito (AMPV, por sus siglas en inglés) como parte del programa del Ejército estadounidense para reemplazar a la familia de vehículos M113 de la era de Vietnam.

Según el Killeen Daily Herald, soldados y civiles del Ejército del Comando de Pruebas Operativas de Fort Hood, o OTC, y soldados locales del 4º Escuadrón, 9º Regimiento de Caballería, 2º Brigada de Combate, estaban probando las capacidades del nuevo vehículo durante un ejercicio con fuego real, en el que se disparó, desde un lanzagranadas del vehículo y desde una ametralladora de calibre 50 contra una torreta giratoria.

Las diversas pruebas que la OTC ha llevado a cabo han tenido lugar en el transcurso de un período de 21 días y están diseñadas para ofrecer la mayor cantidad posible de situaciones del mundo real, dijeron las autoridades.

Los funcionarios de BAE Systems, con sede en Gran Bretaña, que desarrollaron el AMPV, no se presentaron en el campo para permitir las pruebas independientes, pero estaban presentes en los parques de transformación para ayudar con cualquier reparación si fuera necesario.

El AMPV de BAE Systems, con sede en Bradley, es una solución madura, de bajo riesgo y rentable que ofrece rápidamente una capacidad de combate continuo para el Ejército.

Vehículo blindado M 113. 
Las cinco variantes de AMPV -vehículo de carga, vehículo de uso general, vehículo de mando de la misión, vehículo de transporte de mortero y vehículos de evacuación y tratamiento médico- tienen casi un 80% más de volumen interior que su predecesor, y significativamente más potencia y capacidad de supervivencia. Los sistemas de refrigeración y eléctricos también se actualizan para adaptarse a las actualizaciones existentes y futuras. 

El AMPV, que se integrará con el ABCT, debe operar junto con el tanque M1 Abrams y el M2 Bradley.

La nueva flota del Ejército proporcionará una mejora sustancial con respecto a sus actuales vehículos de transporte de personal, aumentando la capacidad de supervivencia, la protección de la fuerza y la movilidad del servicio. También existe un potencial de crecimiento sustancial, lo que permite futuras actualizaciones y desarrollos tecnológicos a lo largo de la vida del programa.