James Mattis presentó su renuncia por "diferencias irreconciliables" en cuestiones políticas con el presidente. 

Trump hizo caso omiso a su consejo de no retirar soldados. Jim Mattis, secretario de Defensa estadounidense. FOTO: AFP 

El secretario de Defensa Jim Mattis renunció el jueves en medio de un coro de protestas contra la decisión del presidente Donald Trump de retirar las tropas estadounidense de Siria y reducir el contingente desplegado en Afganistán. El mandatario defendió el retiro de sus 2.000 soldados en Siria por considerar que Estados Unidos ya no quiere ser el "policía de Medio Oriente" e insistió con que el grupo Estado Islámico (EI) ya está derrotado, pero quiso ir más lejos al decidir reducir el contingente estadounidense desplegado en Afganistán.

Después de que el presidente Donald Trump decidiera retirar tropas de Siria, Mattis, presentó su renuncia por "diferencias irreconciliables" en cuestiones políticas con el presidente, según indicó en una carta publicada por la cadena CNN: "Porque usted tiene el derecho a tener un secretario de Defensa cuyos puntos de vista estén más en consonancia con los suyos en esos y otros asuntos, creo que lo correcto es que dimita de mi cargo", dijo Mattis.

 Según la agencia AP, Trump hizo caso omiso al consejo de Mattis de no retirar a las tropas de Siria. "Una de mis creencias centrales fue siempre que nuestra fuerza como nación está unida de forma indisoluble a la fuerza de nuestro único y exhaustivo sistema de alianzas y asociaciones", sostiene el documento. En este sentido, recalcó que "si bien Estados Unidos sigue siendo la nación indispensable en el mundo libre, no puede proteger sus intereses o jugar ese papel de forma efectiva sin mantener fuertes alianzas y mostrar respeto a esos aliados". El miércoles, Trump había ordenado el retiro total de las tropas de su país en Siria, según un funcionario, luego de que el presidente asegurara que Estados Unidos "derrotó a ISIS" en el país devastado por la guerra.

El Ejército estadounidense cumple rápidamente con la orden de Trump, según informó Bloomberg. "Derrotamos a ISIS en Siria, mi única razón para estar allí durante la Presidencia de Trump", anunció el mandatario. El retiro sería un cambio brusco de la política estadounidense que podría dejar a los aliados kurdos de EE.UU. a merced de las tropas turcas que durante mucho tiempo quisieron perseguir a las fuerzas que consideran terroristas. Por otra parte, este jueves, Trump anunció el retiro de Afganistán de una "significativa" cantidad de los soldados allí estacionados, dijo el jueves una fuente del gobierno estadounidense a la agencia AFP. "La decisión fue tomada. Habrá una retirada significativa", dijo la fuente. Actualmente, Estados Unidos tiene cerca de 14.000 tropas en Afganistán, algunas en misión de la OTAN como apoyo a las fuerzas afganas y otras en operaciones de lucha antiterrorista.

El año pasado, Mattis junto a otros militares convencieron a Trump de que comprometiera el envío de miles de tropas hacia Afganistán, donde los talibanes estaban masacrando a las fuerzas locales y obteniendo importantes avances en el terreno.  El diario The Wall Street Journal informó que más de 7.000 tropas van a emprender la retirada.

 SIN SOLUCIÓN MILITAR 

El enviado especial de Estados Unidos para Afganistán, Zalmay Jalilzad, había afirmado este jueves que los talibán aceptaron que "no hay una solución militar" al conflicto y que se debe optar por una vía política para acabar con la guerra. "Los talibán dijeron que no hay una solución militar, que no pueden derrotarnos", dijo. Agregó que los talibán han defendido que "primero deben sentarse con Estados Unidos y luego con el Gobierno afgano para resolver el problema" y dijo que considera "un error" que los talibán no quisieran reunirse con la delegación del Gobierno afgano que se desplazó a Emiratos Árabes Unidos (EAU). "Los países que estuvieron presentes dijeron que esta postura de los talibán era muy negativa y se plantearon dudas sobre si los talibán realmente querían la paz".

 "¿Quiere Estados Unidos ser el policía de Medio Oriente, para no obtener NADA e invirtiendo vidas valiosas y miles de millones de dólares (...)? ¿Queremos estar ahí para siempre? Es tiempo de que otros peleen finalmente", tuiteó el mandatario al declarar la victoria sobre el grupo extremista Estado Islámico.

 La amenaza latente de ISIS Desde 2014, el Estado Islámico perdió la mayor parte de su autoproclamado "califato" ante las sucesivas ofensivas. Pero Francia, Reino Unido y Alemania, aliados de Estados Unidos en la lucha contra el ISIS y objetivos regulares de acciones terroristas atribuidas al grupo, no coinciden con Trump en que fue derrocado. "El ISIS retrocede pero la amenaza no terminó", dijo el ministro de Exteriores de Alemania, Heiko Maas.

 En París y Londres, principales aliados sobre todo en las operaciones aéreas, insistieron en que la campaña militar contra ISIS continúa. La continuidad de la campaña aérea, en la que Estados Unidos y sus aliados pasaron años atacando blancos de ISIS en todo el país, es foco principal de incertidumbre tras el anuncio de Estados Unidos.  Rebecca Rebarich, portavoz del Pentágono, dijo que el ejército estadounidense continuará sus operaciones aéreas en Siria mientras haya tropas en tierra. "En cuanto a lo que pasará después de la salida de las tropas, no especulamos sobre operaciones futuras", dijo. Mientras tanto, el secretario de Estado Mike Pompeo dijo que Washington tiene la intención de seguir combatiendo a ISIS "ya sea en Siria o en cualquier otro lugar".  (Source/Photo: www.perfil.com).