Ocurrió en Salta y se incautaron casi 600 kilos de droga. Los sospechosos huyeron hacia Chile.
Fue una vigilancia de cinco días a casi 4.000 metros de altura en San Antonio de los Cobres, Salta. Los gendarmes debieron dormir a la intemperie y enfrentar temperaturas bajo cero, pero finalmente vieron aparecer las camionetas de los narcos. Así, comenzó una persecución en la alta montaña que culminó con el secuestro de casi 600 kilos de droga.
Los gendarmes de San Antonio de los Cobres, una localidad salteña de menos de 6.000 habitantes ubicada a 3.774 metros sobre el nivel del mar, incautaron 23 bolsas de arpillera con 644 paquetes que contenían 195,325 kilos de cocaína y 453 panes con 372,375 kilos de marihuana.
El cargamento fue valuado por las fuentes en casi 100 millones de pesos.
No fue fácil desbaratar el tráfico de estupefacientes. Los agentes del Escuadrón 22 de Gendarmería contaban con el dato de que una camioneta Toyota Hilux iba a trasladar una gran cantidad de cocaína y marihuana por una nueva ruta de la droga en ese lugar de alta montaña.
Al tratarse de una zona prácticamente inhóspita, con temperaturas bajo cero, los gendarmes debieron permanecer escondidos en el lugar durante cinco días, durmiendo a la intemperie y a la espera de la llegada de la camioneta sospechosa.
Fue sobre la noche del quinto día que los gendarmes vieron aparecer no una sino dos camionetas con las luces apagadas. Estaban a unos 150 metros de la posición de los agentes del Escuadrón 22, pero igual se percataron de la presencia federal.
Entonces los narcos comenzaron a huir y se inició una persecución. Una de las camionetas tomó el camino rumbo a Chile, mientras que la otra se desvió y fue a dar hacia una barranca empinada.
La Toyota Hilux, con patente chilena, se precipitó por ese barranco para quedar atascada en una quebrada, sobre un banco de arena.
La camioneta de Gendarmería que los perseguía tuvo el mismo destino que la de los narcos, por las condiciones del terreno y dado que el operativo fue por la noche.
Los gendarmes sufrieron lesiones leves pero, pese a ello, dos agentes pudieron caminar para pedir auxilio en el Paso Internacional Sico, un cruce fronterizo de montaña localizado entre San Antonio de los Cobres y San Pedro de Atacama, en Chile.
Interviene en la causa el Juzgado Federal N° 2 de Salta, a cargo de Miguel Antonio Medina.(Source/Photo: Clarín)
Fue una vigilancia de cinco días a casi 4.000 metros de altura en San Antonio de los Cobres, Salta. Los gendarmes debieron dormir a la intemperie y enfrentar temperaturas bajo cero, pero finalmente vieron aparecer las camionetas de los narcos. Así, comenzó una persecución en la alta montaña que culminó con el secuestro de casi 600 kilos de droga.
Los gendarmes de San Antonio de los Cobres, una localidad salteña de menos de 6.000 habitantes ubicada a 3.774 metros sobre el nivel del mar, incautaron 23 bolsas de arpillera con 644 paquetes que contenían 195,325 kilos de cocaína y 453 panes con 372,375 kilos de marihuana.
El cargamento fue valuado por las fuentes en casi 100 millones de pesos.
No fue fácil desbaratar el tráfico de estupefacientes. Los agentes del Escuadrón 22 de Gendarmería contaban con el dato de que una camioneta Toyota Hilux iba a trasladar una gran cantidad de cocaína y marihuana por una nueva ruta de la droga en ese lugar de alta montaña.
Al tratarse de una zona prácticamente inhóspita, con temperaturas bajo cero, los gendarmes debieron permanecer escondidos en el lugar durante cinco días, durmiendo a la intemperie y a la espera de la llegada de la camioneta sospechosa.
Fue sobre la noche del quinto día que los gendarmes vieron aparecer no una sino dos camionetas con las luces apagadas. Estaban a unos 150 metros de la posición de los agentes del Escuadrón 22, pero igual se percataron de la presencia federal.
La Toyota Hilux, con patente chilena, se precipitó por ese barranco para quedar atascada en una quebrada, sobre un banco de arena.
Así quedó la Toyota Kilux de los narcos.
La camioneta de Gendarmería que los perseguía tuvo el mismo destino que la de los narcos, por las condiciones del terreno y dado que el operativo fue por la noche.
Los gendarmes sufrieron lesiones leves pero, pese a ello, dos agentes pudieron caminar para pedir auxilio en el Paso Internacional Sico, un cruce fronterizo de montaña localizado entre San Antonio de los Cobres y San Pedro de Atacama, en Chile.
La camioneta de Gendarmería también quedó atascada en un banco de arena.
Interviene en la causa el Juzgado Federal N° 2 de Salta, a cargo de Miguel Antonio Medina.(Source/Photo: Clarín)
Quiero creer que usaban visores para la oscuridad, termales tal vez. Si los vieron a los gendarmes en plena oscuridad, tal vez los narcos tenían algún tipo de equipos de visión nocturna también. También falló el ocultamiento de los efectivos. De cualquier forma, ahora los tipos van a pensar más de dos veces para intenterlo de nuevo, por temor a que les salga la GNA de nuevo.
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