Recientemente una comisión de la Dirección de Aviación de Ejercito del Ejercito Argentino visito las instalaciones de PZL Mielec en Polonia, subsidiaria de Sikorsky, donde se producen los helicópteros Sikorsky S-70i. Esta visita fue producto de meses de trabajo, primero con asistencia del representante local de Sikorsky en Argentina, REDIMEC S.R.L., comenzaron los requerimientos de información para luego generar un proyecto y delinear los marcos generales de una propuesta.
S-70i durante la visita del Ejercito Argentino en PZL Mielec, Polonia.
Tal como habíamos anticipado en la nota “Actualidad y futuro de las alas rotatorias del Ejercito Argentino” en el numero 5 de la Revista Zona Militar, esto responde a una necesidad de la Aviación de Ejercito de reemplazar sus medios de alas rotativas, con una antigüedad en algunos casos cercana a los 50 años. La Aviación de Ejercito cuenta con helicópteros Bell 212, UH-1H, Huey II y Super Puma, los cuales tienen un horizonte de vida máximo de 5 a 10 años antes de su desprogramación en bloque. El plan actualmente busca simplificar y estandarizar estos 4 modelos en uno, el S-70i. De incorporarse en lo inmediato, el S-70i conviviría aun con el Huey II, esta planificación se desprende como estudios de recuperación de capacidades y normalización de la flota.
A partir de los últimos años, se ha querido brindar una mayor participación de los helicópteros del Ejercito Argentino en apoyo a la comunidad, a partir de la iniciativa del Ministerio de Defensa para la asistencia militar en emergencias. Por lo cual en su momento la primera opción de análisis, con el lineamiento político fue hacia el AW-139, vale aclarar que no es la versión militar sino una versión “militarizada” del aparato civil/comercial. El AW-139M no contaba con financiación disponible para nuestro país. Esta interesante propuesta resultaba en costos y modificaciones asequibles para el alcance de entonces de la Aviación de Ejercito, por lo cual aunque postergada, continua sobre la mesa tal y como oportunamente hubiera comunicado el Secretario de Planificación, Logística y Coordinación de la Asistencia Militar para la Emergencia, Walter Ceballos.
Agusta Westland AW-139 en FIDAE 2014 – Foto: Facundo Rovira
Sin embargo ante el interes de que las FF.AA. apoyen logisticamente a las FF.SS., nuevos planes alternativos han sido delineados con el Black Hawk en mente. Partiendo de la base del renovado apoyo político, con condiciones de financiación blanda muy atractivas, el Black Hawk como aparato probado, confiable, 100% militar, con capacidad todo tiempo, de mayor seguridad y con un 80% de disponibilidad promedio capto la atención del Ejercito Argentino.
Si bien se analizo inicialmente la variante UH-60M, producida en los Estados Unidos, distintas particularidades en la flexibilidad de PZL Mielec para cumplir con rápidos plazos de entrega, modificaciones especificas bajo pedido y capacidad de probar los aparatos en Polonia, volcaron la decisión principalmente hacia el S-70i. Este Black Hawk International es prácticamente idéntico al UH-60M excepto por su sistema de navegación especifico y comunicaciones encriptadas del U.S. Army, los cuales son reemplazados con otros según criterio del cliente. PZL Mielec también ofrecería un kit opcional de artillado, sin embargo, el mismo aun se encuentra en su etapa final de desarrollo.
Este helicóptero puede realizar misiones de transporte, asalto aéreo, operar normalmente en alta montaña, en una amplitud térmica muy importante lo que le permitiría asumir incluso las funciones de apoyo logístico del Eurocopter Super Puma en el Rompehielos Almirante Irizar, una vez afectado nuevamente a la Campaña Antártica de Verano junto a tareas de apoyo a la comunidad.
La propuesta actual aun se encuentra en analisis pero es por 20 aparatos, con un costo total aproximado cercano a los 600 millones de dolares incluyendo soporte del fabricante por 15 años, capacitacion, insumos y repuestos. Dentro del estandar del mercado que puede facilmente consultarse en el portal de DSCA. Lo que representa un desafío importante para nuestro país, desacostumbrado al desembolso de estas cifras, aunque en condiciones muy favorables, lo que lo hace muy atractivo.
Lamentablemente décadas de desinversión llevaron a la obsolescencia y desprogramación en bloque de la flota actual, por lo que para recuperar y potenciar capacidades se deba encarar una inversión mayor a lo normalmente esperado, sin embargo, el proceso de incorporación de aparatos nuevos con muy alto indice de disponibilidad y plazos de entrega casi inmediatos también obligaran a una redefinición política de los presupuestos de la fuerza, necesarios para sostener la operación de los mismos que resultan revolucionarios en sus capacidades frente a la actualidad.
Esperemos que la adquisición de estos necesarios medios pueda materializarse cuanto antes.
Federico Luna - Zona Militar
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