El nuevo avión chino de quinta generación con tecnología stealth Chengdu J-20 ha llevado a cabo por primera vez un entrenamiento marítimo, según informó el miércoles la Fuerza Aérea del Ejército Popular de Liberación.
La reciente misión sobre el mar llevó al avanzado avión a realizar ejercicios en “condiciones reales de guerra”, dijo el portavoz oficial de la Fuerza Aérea, coronel Shen Jinke, a través de un post del servicio. Quiso enfatizar su comentario llamándolo como una “mejora adicional de las capacidades de combate de la Fuerza Aérea”.
China informó en febrero que el avión había obtenido la capacidad operativa inicial y que estaba siendo introduciendo en unidades de combate.
Volado por primera vez en 2011, el J-20 es la respuesta de China a los aviones de quinta generación como el F-22 y el F-35 de Estados Unidos.
Con sus capacidades sigilosas, velocidad y maniobrabilidad, representa potencialmente una importante mejora de la potencia aérea china, aunque se han planteado dudas sobre algunas de sus tecnologías, específicamente sobre sus motores.
Aunque desarrollado a nivel nacional, se cree que el J-20 inicialmente dependía de motores rusos para su propulsión debido a los problemas de fabricación en China.
Algunos informes dicen que desde entonces han sido reemplazados por motores chinos, el WS-10B, que no tienen una relación empuje / peso lo suficientemente grande como para permitir que el J-20 vuele a velocidades supersónicas sin usar quemadores de postcombustión, algo que lo expondría a ser detectado.
China aumentó su presupuesto de defensa en un 8,1 por ciento este año hasta alcanzar 1,1 billones de yuanes (172.700 millones de dólares) mientras se prepara para lanzar su segundo portaaviones y desplegar una serie de aviones de combate y misiles avanzados capaces de atacar objetivos aéreos y marítimos a grandes distancias .
The Associated Press
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