Ni EEUU, ni mucho menos “Israel”, han logrado golpear las baterías de misiles sirios S-300. Si bien es cierto que en Latakia, la mayor parte de los esfuerzos estadounidenses y sus aliados consiste en enviar drones y aviones de reconocimiento para intentar conocer el estado de las baterías de defensa antimisiles rusas, lo cierto que Rusia sabe cómo rechazarlos. Ahora, Rusia ha decidido llevar a cabo otra acción para probar la pieza más preciosa y avanzada del arsenal antiaéreo y antimisiles ruso y mundial, el S-500. La revelación llega en el peor momento para el lado opuesto: los misiles estadounidenses Patriot han fallado totalmente en su misión de proteger a los aliados de EEUU, tanto Arabia Saudí como “Israel”.

El Ministerio de Defensa ruso informó sobre la prueba exitosa del sistema antiaéreo S-500 Prometeo en Siria. Citando al Ministerio de Defensa ruso, el diario ruso Izvestia escribió que Moscú había probado con éxito su sistema de defensa aérea S-500 en el país árabe. El diario también señaló que durante las pruebas de este avanzado sistema de defensa en Siria aparecieron “ciertos problemas”, pero se resolvieron rápidamente. Aunque las características técnicas del S-500 siguen siendo un misterio, algunos informes indican que el sistema es capaz de destruir objetivos que se hallen a una distancia de hasta 600 kilómetros y detectar e interceptar hasta diez misiles balísticos que vuelen a una velocidad ultrasónica (siete kilómetros por segundo). El anuncio se produjo en Moscú, un aliado de Damasco que posee bases militares en Hamaimim, Tartús y otras partes de Siria. Estas bases son constantemente objeto de espionaje y ataques de drones, misiles u ondas electromagnéticas enemigas. (Source/Photo: Russian Federation  MoD)