Será el martes próximo, a las 12, con la participación de 3500 efectivos; se había suspendido por razones presupuestarias Fuente: Archivo - Crédito: Aníbal Greco / LA NACION

Hace un año se suspendió por razones presupuestarias. Esta vez, en medio de la expectativa del Gobierno por mostrar señales alentadoras de una leve recuperación económica, el desfile militar del 9 de julio volverá a las calles porteñas.

Será el martes próximo, a partir de las 12, cuando unos 3500 efectivos, acompañados por 16 aeronaves piloteadas por personal de la Fuerza Aérea y la actuación de 11 bandas musicales de distintos regimientos, recorran la Avenida del Libertador, entre las calles Salguero y Dorrego, en el barrio de Palermo.

Se trata de uno de los actos centrales del Día de la Independencia y participarán del despliegue tropas del Ejército, de la Armada y de la Fuerza Aérea, junto con veteranos de guerra de Malvinas y miembros de las fuerzas de seguridad.

La intención del gobierno de Mauricio Macri, que recreó los tradicionales desfiles del 9 de Julio siete meses después de su asunción, con la fecha patria de 2016, es fortalecer el acercamiento de las Fuerzas Armadas con la comunidad.

Hace tres años, en coincidencia con el bicentenario de la Independencia y ante una entusiasta participación de la población, el desfile reunió a unos 6000 efectivos militares y bandas musicales de las fuerzas armadas de nueve países extranjeros. El festejo terminó con una exhibición en la cancha del Campo Argentino de Polo.

La decisión de Macri puso fin a un período de 16 años sin despliegues de efectivos militares en la fiesta patria. El desfile anterior se había realizado en agosto de 2000, encabezado por el entonces presidente Fernando de la Rúa, por los 150 años de la muerte del general San Martín.

El año pasado, la suspensión del desfile militar del 9 de Julio se produjo en medio de un creciente malestar en las Fuerzas Armadas por un magro aumento salarial, que afectaba a los cuadros castrenses superiores y que luego fue corregido por el Gobierno.

En esa ocasión, el desfile iba a comprender a unos 5600 efectivos y el costo ascendía a $10 millones. El gobierno de Macri optó por evitar el gasto, en momentos en que estaba inmerso en un plan profundo de ahorro de recursos, según la explicación que en ese momento dieron voceros gubernamentales.

Se hizo, en cambio, un desfile cívico militar más austero en San Miguel de Tucumán, con la asistencia del Presidente.(Source/Photo/Author: Mariano De Vedia  /La Nación)