martes, 17 de julio de 2018

Reino Unido presenta la maqueta del nuevo avión de combate Tempest que reemplazará al Typhoon.

El Gobierno británico gastará 2.000 millones de libras esterlinas en financiación de tecnología hasta el 2025.


El secretario de Defensa Gavin Williamson, presentó ayer lunes en el Salón Aronáutico de Farnborough, los planes para el desarrollo de un nuevo avión de combate de sexta generación que servirá en los próximos años en la Real Fuerza Aérea, al que han bautizado con el nombre de Tempest (Tempestad o Tormenta), la nueva aeronave está prevista que sea la que eventualmente reemplace al Eurofighter Typhoon.

Williamson ha destacado que con esta nueva estrategia aérea de combate, diseñada para mantener el Reino Unido como un “primer nivel” del poder militar aéreo después del Brexit, les permita seguir siendo líderes mundiales en el sector tanto en el país como en el extranjero.

“Hemos sido líderes mundiales en el sector aéreo de combate durante un siglo, con una envidiable variedad de habilidades y tecnología, y esta estrategia deja en claro que estamos decididos a asegurarnos de que siga siendo así”.

Declaró que quería que el Tempest volara junto con la actual flota de Typhoons y los F-35 fabricados en Estados Unidos para 2035.

El gobierno dijo que gastaría 2.000 millones de libras esterlinas (2.600 millones de dólares) para desarrollar el avión desde ahora hasta el 2025, utilizando el dinero reservado en 2015 para futuras tecnologías aéreas de combate, pero no dio ninguna estimación del costo total del programa Tempest. Las compañías privadas también están aportando fondos y se cree que han gastado cientos de millones en el avión hasta la fecha.

El Tempest podrá volar sin tripulación, de acuerdo con los planes publicados por el Ministerio de Defensa, y contará con tecnología de última generación a bordo diseñada para hacer frente a las amenazas modernas.

Esto incluirá tecnología de “enjambre” que utiliza la inteligencia artificial y el aprendizaje automático para alcanzar sus objetivos, así como armas de energía dirigida (DEW por sus siglas en Ingles), que utilizan ráfagas concentradas de energía láser, de microondas o de energía de haz de partículas para infligir daño.

Bajo el apodo de Team Tempest será construido por un consorcio liderado por la firma de defensa británica BAE Systems, con el fabricante de motores Rolls-Royce, la compañía aeroespacial italiana Leonardo y el fabricante de misiles paneuropeo MBDA.

Sin embargo, no habrá confirmación de los numerosos proveedores necesarios para construir el avión hasta el año 2025, y la capacidad operativa debería seguir una década después.

Williamson señaló que la estrategia de combate aéreo del gobierno ayudará a asegurar que el Reino Unido sea un líder mundial en el sector aéreo de combate, que apoya 18.000 puestos de trabajo en el Reino Unido.

“La industria de defensa británica contribuye enormemente a la prosperidad del Reino Unido, creando miles de puestos de trabajo en un próspero sector de fabricación avanzado y generando una capacidad pública del Reino Unido que es la mejor del mundo”, señaló.

Si bien se prevé que el Tempest sustituya como un reemplazo eventual al Typhoon, cuya retirada está programada para el 2040, hasta entonces, volarán uno junto al otro a partir del 2035.

El nuevo avión no afectará al pedido de 138 F-35 fabricados por la firma estadounidense Lockheed Martin en asociación con BAE Systems, afirmaron funcionarios de la RAF.

El Reino Unido ha sido excluido de un proyecto de avión de combate franco-alemán que ya está en marcha, y no ha construido un avión de combate solo durante varias décadas.

Sin embargo, Williamson, hablando con un grupo de jefes militares de todo el mundo, indicó que Gran Bretaña estaba buscando un socio internacional en el proyecto.

“Nuestro enfoque depende de la colaboración internacional”, dijo.

“Mi pregunta a los posibles socios aquí en la sala es simple, ¿cómo pueden trabajar con nosotros, cómo podemos trabajar con ustedes?”

Suecia e Italia se ha presentado como posibles socios con sus respectivas industrias aeroespaciales, ya que no están directamente involucradas en otros esfuerzos multinacionales como el programa franco alemán de cazas europeos.

Rob Davies

No hay comentarios:

Publicar un comentario