São Bernardo do Campo
Por: Roberto Caiafa
Thales inauguró en el pasado 8 de diciembre, la Plataforma Industrial del Radar Secundario en las instalaciones de Omnisys en Sao Bernardo do Campo (SP), donde se producirán los RSM 970 S utilizados para el control de aproximación y de vigilancia en ruta. Este modelo es el más vendido en el mundo y cuenta con la última tecnología en radares, dando a los controladores de tráfico aéreo total apoyo apoyo en situaciones de movimientos de aeronaves.
La transferencia tecnológica (ToT) incluye todo el conocimiento, la documentación, medios de integración, test y medios para el mantenimiento de dichos radares, además de un completo servicio postventa. Infodefensa.com ha podido visitar, por invitación de Thales/Omnisys, las instalaciones en las que se están produciendo, testados y homologando estos sistemas.
El vicepresidente de Thales en América Latina, Rubén Lazo, destacó que “fin del proceso de transferencia de tecnología en Brasil es un hito muy importante”. Lazo explicó que, gracias a la tecnología de Thales, “el país es ahora capaz de producir por primera vez el radar secundario, equipos de gran relevancia para el control del tráfico aéreo nacional”.
El vicepresidente de Thales recordó la labor de su empresa en este proceso, “para facilitar esto”, afirmó, “tenemos la experiencia tecnológica y la inversión en equipos multidisciplinarios y especializados de nuestra estructura local, reforzando de esta manera la importancia estratégica del país para el Grupo Thales, en línea con nuestro objetivo de duplicar su tamaño en cinco años".
Con la inauguración de la plataforma industrial del Radar Secundario, Thales también consolida su Centro de Excelencia en Radar, que fabricará todas las partes de alta tecnología y las críticas de los radares primarios y secundarios. En este sentido, el director de Omnisys, Luis Henriques, “el centro cuenta con el conocimiento, los medios y los procesos de fabricación, integración y apoyo técnico de radares, donde se aplican las últimas tecnologías”. Según recordó Henriques, “con esto, Brasil es ahora parte del selecto grupo de países fabricantes radares de vigilancia del espacio aéreo".
El modelo RSM 970 S posee las funcionalidades completas del Modo S, un medio de comunicación entre la aeronave y el radar que clasifica de un modo único, impidiendo que sea confundida con otras aeronaves en vuelo aumentando la seguridad del tráfico aéreo.
El sistema también permite al operador de vuelo seleccionar la aeronave con la que desea comunicarse, además de posibilitar el envío de información más detallada sobre la identificación de vuelo de la aeronave. Por lo tanto, cubre la interrogación selectiva, la vigilancia básica mejorada y el canal de datos completo. Estos sistemas están validados por la ICAO y Eurocontrol.
El aval de estas dos instituciones hace de este radar una inversión segura para los Sistemas de Control de Navegación Aérea.
La dualidad del Sistema Brasileño
En todo el territorio nacional, existen 64 sitios que emplean radares o sensores de Thales/Omnisys.
Respecto a las relaciones entre empresa y Gobierno, Rubén Lazo recordó que "el compromiso de Thales con Brasil es evidente al enumerar los logros de 2015”. El vicepresidente de la empresa enumeró una serie de hitos en las relaciones bilaterales: “Abrimos el Centro de Tecnologías Espaciales en São José dos Campos; nos encontramos en el programa KC-390 con la central inercial de navegación del modelo; nacionalizamos el sistema integral de comunicaciones SOTAS utilizado en el blindado 6x6 Guaraní, en los transportes de infantería M113 y en los nuevos obuses M109 A5 BR (a través de la empresa capixaba Geocontrol); aseguramos para Omnisys el dominio completo en la producción de radares secundarios, incluyendo a la exportación; y a finales de enero, en esas mismas instalaciones, se inaugurará el Centro de Radares de Brasil, diseñado específicamente para atender al Programa de Submarinos (Prosub) y a buques de combate. También estamos confirmando para diciembre 2016 el lanzamiento del Satélite Geoestacionario de Defensa y Comunicaciones, o SGDC".
El vicepresidente de Thales Air Systems, Herve Darmmann, junto con su equipo, fue el responsable del programa de transferencia del RSM 970 S. "Recibimos a los ingenieros y técnicos de Omnisys en Francia, donde se aprobaron y repasaron sus conocimientos. Con la capacidad de este grupo, Omnisys es apta, a partir de ahora, no sólo en lo que respecta a la fabricación, integración, calibración y aceptación, sino en la operación y mantenimiento de estos radares, además del desarrollo de nuevas soluciones y mejoras para dichos equipo”.
Darmmann recalcó que “Omnisys reúne a todo el cuadro de competencias necesarias para satisfacer las necesidades de cualquier cliente de la red mundial de Thales. Prueba de ello es el contrato de radarización de Bolivia anunciado recientemente, que incluye seis radares secundarios para el país andino hechos en Brasil".
En cuanto a este contrato, Darmmann explicó que “el acuerdo con Bolivia prevé el suministro de 13 radares, que forman la columna vertebral de la infraestructura de vigilancia aérea del país, entre ellos cuatro radares de defensa aérea, un radar primario de vigilancia Star 2000 de dos radares de aproximación de Banda L y seis radares secundarios RSM 970”.
El vicepresidente de Thales Air Systems anunció que “Thales también integrará y gestionará todo el sistema para las operaciones, así como la comunicación de estos nuevos equipos con los radares repartidos por todo el país. Los radares se integrarán en un nuevo complejo que albergará la central de control tráfico aéreo. Con 2.500 metros cuadrados, se construirá en los próximos meses, el pronóstico es que esté terminado para el 2017 coincidiendo con el paso al nuevo sistema operativo”.
Respecto a la central de tráfico áreo, Darmmann aseguró que “recibirá el Topsky-ATC, el sistema ATM más avanzado del mundo, utilizado en operaciones avanzadas de gestión de tráfico y también contará con el sistema SkyView air C4I, que proporciona una visión integrada de las operaciones de defensa aérea”. Esto quiere decir que Bolivia repite la dualidad militar/civil del sistema brasileño que opera en paralelo de forma integrada”. Darmmann recalcó que “dominar todo el proceso de construcción del radar secundario es de gran importancia, ayudando a garantizar la seguridad del espacio aéreo".
Foto: Roberto Caiafa
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