Con optimismo podría decirse que en la situación actual de las Fuerzas Armadas Argentinas prevalece cierta constante de incertidumbre, y tal vez vulnerabilidad, con respecto al resto de la región. Los números hablan por su cuenta, tal y como lo expresó el SIPRI en su último informe de estadísticas mencionando que la inversión en defensa en base al PBI de Argentina fue del 0,57%. Solo con este dato, la Argentina se ubica en el último puesto de Latinoamérica exceptuando a Venezuela, país que directamente dejó de ser medido por el organismo debido a sus dificultades macroeconómicas ya conocidas.
Continuando con los términos de asignación de presupuesto en función del PBI, Argentina pasó de invertir el 1,18% en el 2001 a 0,76% en el 2011, diez años en los cuales el porcentaje varió pero no dejó de descender. En promedio, desde el 2001 hasta el 2021, la inversión de Argentina en defensa y en relación a su producto bruto interno fue de 0,84% anualmente.
|
Inversión presupuestaria en defensa en relación al PBI en América del Sur 2001-2021 (sin Venezuela). Fuente: Elaboración propia en base a datos obtenidos del SIPRI (2021) |
Para poder dimensionar la gravedad de estas cifras, es menester compararlas con sus pares de la región. El promedio de los gastos en defensa en relación al PIB en 2021 de Bolivia fue del 1,73%, mientras que en Brasil fue del 1,47%. Chile se destaca con un 2,23% mientras que Colombia sobrepasa al resto con un promedio del 3,33% de su producto bruto interno. Le sigue Ecuador, con un 2,47%, mientras que Paraguay, Perú y Uruguay ocuparon el 0,90%, 1,43% y 2%, respectivamente. Venezuela, tal y como fue mencionado anteriormente, no es contenida en estas mediciones por el SIPRI. En resumidas cuentas, esto muestra que la Argentina ha tocado un piso histórico en asignación presupuestaria en defensa en relación a su PIB.
|
Promedio de la inversión presupuestaria en defensa en relación al PBI en América del Sur 2001-2021 (sin Venezuela). Fuente: Elaboración propia en base a datos obtenidos del SIPRI (2021) |
Otra variable a considerar puede ser el presupuesto de defensa medido en dólares constantes asignados. Tomando una línea temporal basada en los datos desde el 2001 hasta el año pasado, los gastos del 2021 a nivel mundial fueron de 2113 mil millones de dólares, donde 883 mil millones representaron a las Américas y solo 45 mil millones correspondían a América del Sur. Siguiendo estas consideraciones, y realizando un salto temporal de diez años, el gasto militar de la Argentina en 2001 fue de 2.667,4 millones de dólares, en 2011 de 2.948,2 y en 2021 de 2.406,7. Estos números son sumamente bajos comparados con los tres países con mayor inversión en defensa, como son Brasil, Colombia y Chile. Y aunque en el caso de Argentina estos valores son estimados por el SIPRI, Brasil sobrepasa los números de su vecino austral, gastando 15.342,4 millones de dólares en 2001, 19.427,5 en 2011 y 18.746,8 en 2021. En segundo lugar, Colombia invirtió 4.672,5 millones de dólares en 2001, 7.205,9 en 2011 y 10.006,3 en 2021, mientras que Chile, en tercer lugar, destinó 2.702,4 millones de dólares en 2001, 4.565,8 en 2011 y 5.743,4 en 2021. Si se tiene en cuenta solo los números del año pasado, Argentina quedó en sexto lugar en la tabla del SIPRI en términos de millones de dólares constantes sobre gastos militares.
|
Presupuesto de defensa medido en dólares constantes asignados, años 2001, 2011 y 2021. Fuente: Elaboración propia en base a datos obtenidos del SIPRI (2021) |
Una cuestión fundamental a resaltar es que SIPRI es una de las instituciones más prestigiosas en el análisis de cuestiones vinculadas a la seguridad internacional, aunque deba realizar ciertas salvedades en determinados países por sus existentes dificultades económicas. No solo Venezuela es el claro ejemplo de ello, sino que el organismo cuenta con ciertas dificultades con la Argentina desde el año 2007 debido a las cuestiones vinculadas al tipo de cambio. Por ejemplo, suele hacer mención a “valores estimados” en múltiples variables, aunque ello no ocurre en los datos sobre la inversión de presupuesto en función del PBI ya que son números no solo certeros sino también legitimados por diversos analistas en la Argentina, siempre en función de los resultados que hubo en las diversas gestiones gubernamentales.
Las constantes mermas en materia presupuestaria, y a sabiendas de que en general la incorporación de equipamiento y de operaciones en las Fuerzas Armadas es tomada en función de costos en dólares, las constantes crisis económicas y los recortes en la cartera de defensa profundizan el desgaste de las capacidades argentinas. El 2021 fue testigo de los problemas operativos y de recambio de equipamiento, aunque el Ministerio de Defensa sostenga firmemente que el Fondo Nacional de Defensa (FONDEF) -sancionado en el año 2020- puede llegar a revertir la situación. Pese a estas intenciones oficiales, la incorporación de material no ha sido sostenida, enfocándose en ciertas cuestiones que no hacen a las capacidades centrales de las tres Fuerzas Armadas. Resta ver, entonces, cuáles son los resultados (y desafíos) para el año en curso. (Source/Photo: Zona Militar)
No hay comentarios:
Publicar un comentario