Se dice que el aeródromo de Bagram, que en su día fue el eje de la misión de la OTAN liderada por Estados Unidos en Afganistán, vuelve a tener energía y a operar con aviones. Se rumorea que una fuerza extranjera está involucrada, con los dedos apuntando a China, que negó estar mirando la base.
Una foto compartida en las redes sociales muestra supuestamente la base el domingo por la noche con los focos encendidos. Se afirma que varios aviones han aterrizado y despegado del aeródromo en las últimas horas. De confirmarse, sería la primera vez que Bagram ha prestado servicio a los aviones en casi 50 días, lo que supondría un avance significativo.
La base fue abandonada por las tropas estadounidenses a principios de julio, cuando el Pentágono se preparaba para la retirada de la mayoría de sus tropas de Afganistán. Se había previsto que el gobierno nacional afgano la mantuviera, pero el posterior colapso del régimen en agosto puso a Bagram en manos de los talibanes.
Hay dudas de que el movimiento militante talibán tenga la experiencia necesaria para gestionar la base o incluso que la necesite, por lo que se presume que la reanudación del tráfico aéreo significa que una potencia extranjera está involucrada. Inmediatamente se señaló a China como probable nuevo operador de Bagram, a pesar de que Pekín había declarado anteriormente que no tenía intención de desplegar tropas en Afganistán.
A principios de septiembre, un periódico indio afirmó que los líderes talibanes estaban en conversaciones con Pakistán y China sobre el futuro de las bases aéreas de Afganistán, y que Bagram había sido programado para ser entregado a operadores chinos. El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Wang Wenbin, rechazó el informe como “una noticia puramente falsa”.
El domingo, los talibanes negaron que hubiera presencia militar china en Bagram. Algunos informes especulaban con que la base podría haber sido encendida durante la noche como precaución de seguridad debido a algunos combates que se estaban produciendo en la zona.
La decisión de abandonar el aeródromo de Bagram es un asunto espinoso para la administración Biden. Los críticos republicanos afirman que el ejército estadounidense debería haberlo conservado y utilizarlo para la evacuación de tropas y aliados de Afganistán, en lugar de recurrir al aeropuerto internacional de Kabul.
Altos funcionarios del Pentágono rechazaron el razonamiento, diciendo que asegurar Bagram y el tramo de tierra de 25 millas (40 km) que lo separa de la capital afgana habría requerido un número de tropas significativamente mayor que el límite de 650 que pretendía. Esto habría violado el acuerdo de retirada que Estados Unidos alcanzó con los talibanes bajo la presidencia de Donald Trump, haciendo que los soldados fueran objetivos fáciles para los ataques de los militantes.
Una toma de posesión china de la base, que se convirtió en un símbolo de la ocupación militar estadounidense de dos décadas en Afganistán, había sido predicha por Nikki Haley, la embajadora estadounidense de la era Trump ante la ONU. En declaraciones a Fox News, afirmó que Pekín “haría un movimiento por Bagram” como parte de una estrategia más amplia para “utilizar a Pakistán para fortalecerse e ir contra la India.” (Source/Photo: West Asia News Agency)
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