miércoles, 26 de abril de 2017

China bota su segundo portaaviones para hacer frente a EE.UU. en el Pacífico


 Su entrada en servicio coincide con la escalada militar con Corea del Norte y la llegada del portaaviones estadounidense «Carl Vinson» para impedir nuevos ensayos nucleares.

Dentro de las celebraciones por el 68 aniversario de su Armada, que se conmemoró este domingo, China ha botado este miércoles su segundo portaaviones, según informa la agencia estatal de noticias Xinhua. Al contrario que el primero, un modelo soviético comprado a un astillero ucraniano en 1998 y luego reformado, este nuevo buque es el primero de construcción nacional y ejemplifica las aspiraciones de Pekín sobre su expansión por el Pacífico.

Con sus 70.000 toneladas, 315 metros de largo y 75 de ancho, el Tipo 001A – como todavía se denomina a la espera de recibir su nombre oficial – ha sido botado en los astilleros de Dalian, importante ciudad portuaria al nordeste del país. Tal y como informa el «Diario del Pueblo», altavoz del Partido Comunista, a la ceremonia inaugural de su singladura ha asistido el vicepresidente de la Comisión Militar Central, Fan Changlong.

Algo mayor que el «Liaoning», el primer portaaviones de China, este nuevo buque presenta algunas mejoras operativas e incluye un hangar con capacidad para albergar más cazas J-15, así como más espacio en cubierta para helicópteros y otros aparatos. Con una velocidad de crucero de 31 nudos, se empezó a construir a finales de 2013, un año después de que Pekín botara el «Liaoning». Como este, mantiene su singular pista de despegue con forma ascendente y se sumará a sus patrullas por el Océano Pacífico para confirmar así el auge naval de China.

Aunque su botadura estaba prevista para estas fechas, ha coincidido con la última escalada de la tensión militar con Corea del Norte, hacia cuyas aguas se dirige un portaaviones de Estados Unidos para impedirle al régimen de Kim Jong-un nuevos ensayos nucleares y de misiles. Antes de llegar a la Península Coreana, el ala de ataque formada por el portaaviones «Carl Vinson» y otros barcos de guerra está efectuando unas maniobras con buques japoneses en el Mar de Filipinas, informó este miércoles en un comunicado la Séptima Flota. Su travesía ha resultado bastante controvertida porque, días después de que el presidente Trump anunciara su rumbo a Corea, se descubrió que navegaba en dirección contraria, ya que tenía programadas otras maniobras en Australia que finalmente fueron canceladas. Para hacer una demostración de fuerza ante el régimen estalinista de Pyongyang, que lució sus misiles en un gran desfile militar a mediados de este mes, el Pentágono también ha enviado el submarino nuclear «Michigan» al puerto surcoreano de Busan. Su llegada coincidió con las masivas tracas de artillería que el régimen del joven dictador Kim Jong-un disparó este martes para conmemorar el 85 aniversario de su Ejército, celebrado con una auténtica lluvia de fuego.

A la espera de la llegada del portaaviones nuclear «Carl Vinson», la botadura del Tipo 001A pone de relieve la diferencia que todavía separa a la Armada china de la estadounidense, según analiza el diario de Hong Kong «South China Morning Post». Mientras el autoritario régimen de Pekín solo tiene dos buques de este tipo y planea botar otro en 2021, la Casa Blanca cuenta con diez y este año pondrá en servicio su superportaaviones Gerald R. Ford, que será el doble de grande con 100.000 toneladas y dos reactores de propulsión nuclear.

Para 2020, el Pentágono prevé destinar el 60 por ciento de sus naves a la región de Asia-Pacífico, por donde ya navegan cuatro de sus portaaviones. Además, la Armada estadounidense se ha fijado aumentar su número de barcos de 272 a 350 en el futuro, mientras que el Ejército añadirá 60.000 nuevos soldados. Buena prueba de su compromiso con las fuerzas armadas es que Trump ya ha aumentado este año un 10 por ciento el presupuesto militar.

«Haciendo frente a la cada vez más complicada seguridad marítima y lucha por la soberanía, hace falta una Armada fuerte para proteger la integridad territorial, los intereses nacionales y en el extranjero, así como para participar en tareas de cooperación internacional», justificó el «Diario del Pueblo» en una tribuna de opinión la botadura del nuevo portaaviones chino.

Mientras el anterior, el «Liaoning», fue comprado de saldo por 20 millones de dólares porque, en teoría, iba a albergar un casino flotante en Macao, el Tipo 001A marca las aspiraciones de Pekín para hacer frente a EE.UU. en su pugna por la hegemonía en el Pacífico.

CHINA BOTA SU PRIMER PORTAAVIONES DE CONSTRUCCIÓN NACIONAL
Por: Michael Martina (Reuters). BEIJING

China lanzó su primer portaaviones de fabricación nacional este miércoles en medio de la creciente tensión sobre Corea del Norte y la preocupación de Pekín sobre sus intereses en el Mar de China Meridional.

Los medios de comunicación estatales han citado a expertos militares diciendo que el portaaviones, el segundo de China y construido en Dalian, no se espera que entre en servicio hasta 2020, una vez que ha sido equipado y armado.

Los analistas militares extranjeros y los medios de comunicación chinos han publicado durante meses imágenes de satélite, fotografías e historias sobre el desarrollo de este segundo portaaviones. China confirmó su existencia a finales de 2015.

La botadura (del nuevo portaaviones) “muestra que el diseño y construcción de portaaviones de nuestro país ha logrado importantes resultados paso a paso”, dijo la agencia de noticias Xinhua.

La televisión estatal mostró al portaaviones, con su cubierta adornada con banderas rojas, siendo empujado por remolcadores.

Fan Changlong, vicepresidente de la poderosa Comisión Militar Central de China, presidió la ceremonia, dijo Xinhua, durante la cual se rompió una botella de champán en la proa.

El lanzamiento sigue a la celebración de China el domingo del 68 cumpleaños de la fundación de la marina china, y se produce en medio de tensiones renovadas entre Corea del Norte y Estados Unidos sobre los programas nucleares y de misiles de Pyongyang.

Poco se sabe sobre el programa de portaaviones de China, que es un secreto de Estado.

Pero el gobierno ha dicho que el diseño del nuevo buque se basa en las experiencias del primer portaaviones del país, el “Liaoning”, que se adquirió sin terminar a Ucrania en 1998 y se reconstruyó en China.

El nuevo portaaviones de propulsión convencional será capaz de operar aviones de combate Shenyang J-15 “Flying Shark”.

A diferencia de los portaviones nucleares de largo alcance de la marina estadounidense, ambos disponen de la rampa “Sky Jump”, diseñada para dar a los aviones de combate suficiente elevación para despegar de sus cubiertas más cortas. Pero carecen de catapultas para lanzar aviones, como sus contrapartes estadounidenses.

China no necesita equiparar a los Estados Unidos

El nuevo portaaviones chino permitirá expandir la proyección aeronaval de Pekín, aunque ambos buques son considerados como unidades de instrucción. 
La marina de guerra de China ha estado tomando un papel cada vez más prominente en los últimos meses, con un almirante estrella tomando el mando del primer portaaviones que navega alrededor de Taiwán y los nuevos buques de guerra chinos que se despliegan en lugares lejanos.

El “Liaoning” ha participado en ejercicios militares, incluso en el Mar del Sur de China, pero se espera que sirva más como un buque de entrenamiento. Los medios estatales han dicho que el nuevo portaaviones estará más dedicado a operaciones secundarias.

China reclama casi todo el Mar de China Meridional, que se cree tiene enormes depósitos de petróleo y gas, a través de los cuales transitan alrededor de U$ 5.000 millones del comercio marítimo, y ha estado construyendo instalaciones militares en los islotes que controla en aquella zona, incluyendo aeródromos.

Brunei, Malasia, Filipinas, Taiwán y Vietnam también tienen reclamos sobre los islotes ocupados por China.

Taiwán, reclamada por Pekín como suya, ha dicho que China está construyendo actualmente dos nuevos portaaviones, pero China no ha confirmado oficialmente la existencia de otro buque.

Medios de comunicación estatales chinos han citado a expertos como diciendo que el país necesita por lo menos seis portaaviones. Estados Unidos opera 10 y planea construir dos más.

El general de división Chen Zhou, investigador de la Academia de Ciencias Militares, dijo a periodistas en marzo que China no superaría a Estados Unidos en grupos de portaaviones. “China no tiene necesidad de esto”, dijo.

Sam Roggeveen, investigador senior del Lowy Institute, con sede en Sydney, dijo que para cuando China tuviera la mitad de ese número, podría ir de punta a punta con la marina de los Estados Unidos en Asia y el Pacífico.

“Dado que los estadounidenses tienen obligaciones y responsabilidades globales pero China no, entonces efectivamente en ese punto estarían igualados”, dijo Roggeveen.

La mayoría de los expertos están de acuerdo en que el desarrollo de esta fuerza será un esfuerzo de décadas, pero el lanzamiento de la segunda portaaviones tiene un cierto valor de prestigio para Beijing, visto por muchos analistas como deseosos de erosionar la prominencia militar estadounidense en la región.

“Con dos portaaviones se podría decir sin mucho temor al error de que China, con excepción de Estados Unidos, es la fuerza marítima más poderosa de la región de Asia y el Pacífico”, dijo Roggeveen.

Fuente: Reuters (http://reut.rs/2qdwo3w)

No hay comentarios:

Publicar un comentario