Los nuevos buques de combate de la Fuerza Naval de EE.UU. podrían contar con armas que, hasta ahora, solo formaban parte de las historias de ciencia ficción.
Flickr/Office of Naval Research/U.S. Navy/John F. Williams
Peter Fanta, contraalmirante de la Armada de Estados Unidos, ha indicado en una entrevista a 'Defense News' que su país podría armar sus destructores de última generación con tamaño de crucero con gran cantidad de rayos láser, cañones de riel e, incluso, armas de rayos de partículas, además de los tubos de misiles habituales. Estas nuevas naves reemplazarían a los destructores lanzamisiles de la clase Arleigh Burke y los cruceros de misiles Ticonderoga.
"Necesito una nave comandante de defensa aérea con un radar capaz de responder ante las amenazas (…) y que me permita defender la base marítima, ya sea con un portaaviones, un grupo de ataque expedicionario o un conjunto de petroleros", ha declarado Fanta.
Se espera que la Armada de EE.UU. desarrolle una nueva nave multifuncional, capaz de actualizarse para adaptarse con facilidad a las nuevas misiones y tecnologías: "No voy a diseñar algo que se parezca a una nave, estoy creando algo parecido a una caja en el agua con capacidad para realizar varias tareas, porque cada vez que construimos una nave de una sola misión tenemos que darla de baja antes de que termine su vida útil", ha desvelado Peter Fanta.
Sin embargo, el contraalmirante ha señalado que se trata del concepto inicial y que faltan, al menos, 15 años hasta que empiecen a construir el primero de esos nuevos buques. Hasta entonces, la Armada tendrá que encontrar una fuente de energía que resulte óptima para estos sistemas de alto consumo.
Flickr/Office of Naval Research/U.S. Navy/John F. WilliamsPeter Fanta, contraalmirante de la Armada de Estados Unidos, ha indicado en una entrevista a 'Defense News' que su país podría armar sus destructores de última generación con tamaño de crucero con gran cantidad de rayos láser, cañones de riel e, incluso, armas de rayos de partículas, además de los tubos de misiles habituales. Estas nuevas naves reemplazarían a los destructores lanzamisiles de la clase Arleigh Burke y los cruceros de misiles Ticonderoga.
"Necesito una nave comandante de defensa aérea con un radar capaz de responder ante las amenazas (…) y que me permita defender la base marítima, ya sea con un portaaviones, un grupo de ataque expedicionario o un conjunto de petroleros", ha declarado Fanta.
Se espera que la Armada de EE.UU. desarrolle una nueva nave multifuncional, capaz de actualizarse para adaptarse con facilidad a las nuevas misiones y tecnologías: "No voy a diseñar algo que se parezca a una nave, estoy creando algo parecido a una caja en el agua con capacidad para realizar varias tareas, porque cada vez que construimos una nave de una sola misión tenemos que darla de baja antes de que termine su vida útil", ha desvelado Peter Fanta.
Sin embargo, el contraalmirante ha señalado que se trata del concepto inicial y que faltan, al menos, 15 años hasta que empiecen a construir el primero de esos nuevos buques. Hasta entonces, la Armada tendrá que encontrar una fuente de energía que resulte óptima para estos sistemas de alto consumo.
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