miércoles, 20 de mayo de 2015

Londres investiga las denuncias sobre seguridad en sus submarinos nucleares


La Royal Navy (Marina británica) confirmó ayer que ha abierto una investigación sobre la seguridad de la flota de submarinos integrados en el sistema Trident de disuasión nuclear creado durante la Guerra Fría, en respuesta a las acusaciones vertidas por un militar. Muchos de estos submarinos han visitado y visitarán la base naval del Peñón. 

Las pesquisas comenzaron después de que William McNeilly, quien se encuentra en paradero desconocido, asegurase en un escrito de 18 páginas colgado en internet que los fallos en la seguridad auguran un "desastre inminente". 

En el texto, titulado "La amenaza nuclear secreta", McNeilly explica que durante este año ha desempeñado el puesto de técnico ingeniero de Submarinos en el portaaviones HMS Victorious. 

Asegura que algunos submarinos presentas fugas y las medidas contra incendios son inadecuadas, al tiempo que denuncia que las autoridades no llevan a cabo controles de seguridad mientras las naves están atracadas en la base militar de Faslane (Escocia). 

En un comunicado emitido ayer, la Royal Navy confirma que ha abierto una investigación y que NcNeilly, natural de Belfast (Irlanda del Norte), es miembro de la Marina británica y se declaró preocupada "por su paradero y bienestar". 

No obstante, recalca que "está totalmente en desacuerdo" con sus acusaciones, las cuales son "opiniones subjetivas y carentes de fundamento" vertidas por un "marinero de muy bajo rango". 

"La Royal Navy se toma la seguridad nuclear extremadamente en serio y estamos investigando a fondo tanto la cuestión de la emisión no autorizada de información como su contenido", agrega una portavoz, quien insiste en que la flota de submarinos Trident está sometida "a un estricto régimen de vigilancia". 

En su documento de denuncia, McNeilly asegura que recurrió a la cadena de mando reglamentaria para plantear sus preocupaciones ante los superiores, pero fue ignorado y entonces decidió hacerlas públicas. 

La fuerza de disuasión nuclear británica, herencia de la Guerra Fría, se basa en el sistema Trident de misiles balísticos intercontinentales que pueden lanzarse desde una flota compuesta por cuatro submarinos. 

Los Trident II D5, fabricados por el gigante del sector de armamentos estadounidense Lockheed Martin, sustituyeron en 1994 a los viejos Polaris, lanzados también desde sumergibles. 

No obstante, algunas unidades de esta flota han estado implicadas en incidentes, entre ellos el que protagonizó el HMS Tireless en 2000, cuando provocó una larga polémica entre el Reino Unido y España al permanecer atracado durante un año en la colonia británica de Gibraltar para reparar una avería en su reactor nuclear.


http://www.europasur.es/

No hay comentarios:

Publicar un comentario