Los aviones F-35 fabricados por Lockheed Martin ayudarían a reemplazar la flota alemana de Tornados, que tiene décadas de antigüedad, según informes de los medios de comunicación confirmados por la fuente.
Los Tornados son los únicos aviones capaces de transportar las bombas nucleares estadounidenses estacionadas en Alemania, que son una parte clave de la disuasión de la OTAN.
Los aviones furtivos F-35 de Lockheed se consideran los aviones de combate más modernos del mundo, y su forma y revestimiento únicos los hacen más difíciles de detectar por los radares enemigos.
Los aviones Eurofighter adicionales que Alemania planea comprar, fabricados por un consorcio que incluye a Airbus, se utilizarían al parecer para otras operaciones, como la guerra electrónica y las misiones de escolta.
El mes pasado, el canciller alemán Olaf Scholz se comprometió a invertir 100.000 millones de euros (112.000 millones de dólares) en la Bundeswehr, que está crónicamente infradotada.
El aumento del gasto supone un importante cambio de rumbo para la primera economía europea, que rompe con su política de mantener un perfil militar bajo, en parte por la culpa de la Segunda Guerra Mundial.
Después de años de críticas por no asumir suficiente carga financiera en la alianza militar de la OTAN, Scholz también se ha comprometido a gastar más del dos por ciento del producto interior bruto de Alemania al año en defensa, superando el objetivo de la OTAN.
El cambio fue provocado por el regreso de la guerra al continente europeo tras la invasión rusa de Ucrania el 24 de febrero, que sacudió la sensación de seguridad de Alemania y puso en evidencia el estado de sus fuerzas armadas.
La compra del F-35 será un duro golpe para Boeing, cuyo F-18 fue el favorito de la exministra de defensa alemana Annegret Kramp-Karrenbauer para reemplazar al Tornado.
Por otro lado, la compra del F-35 plantea interrogantes sobre el futuro del avión de combate común europeo que se está desarrollando con España y Francia.
Conocido como Sistema Aéreo de Combate Futuro (FCAS), el avión está programado para sustituir a los aviones Rafale de fabricación francesa y a los Eurofighter alemanes y españoles en 2040.
A finales del mes pasado, Scholz trató de disipar los temores de que el proyecto fuera innecesario, afirmando que el proyecto europeo conjunto era una “prioridad absoluta”.
“Para mí es importante… que construyamos la próxima generación de aviones de combate y tanques en colaboración con los socios europeos”, dijo.
Pero la Bundeswehr alemana tiene que sustituir su flota de Tornados a corto plazo porque se ha quedado “obsoleta”, añadió Scholz.(Source/Photo: Agence France-Presse)
No hay comentarios:
Publicar un comentario