Base naval de Puerto Belgrano.

PLANIFICAN EJERCICIO DE SALVAMENTO EN EL MAR. APURAN TRAER REPUESTOS DE ORIGEN BRITÁNICO - No está en la hoja de ruta ni se trata el intercambio de datos sobre pesqueros en el Atlántico sur; muchos de los que operan en la Milla 201 lo hacen con licencia de Malvinas.

Hoy en el edificio Libertador comienza la segunda reunión bilateral sobre Defensa con el Reino Unido. La primera ronda de apertura luego de 14 años de interrupción ocurrió en Londres, en febrero de 2018. El anfitrión es José Vila, subsecretario de Asuntos Internacionales de Defensa. Este funcionario asistió a la edición que se llevó a cabo en Gran Bretaña, y, como era el re-estreno del vínculo tras el enfriamiento de la administración Kirchner, fue acompañado por el embajador argentino Renato Sersale Di Cerisano. Ahora de local, Vila junto a su colega británico Roger Hutton, director de Seguridad Internacional, tratarán de avanzar en los temas de la agenda fijados en aquella oportunidad.

La interoperabilidad militar es la actividad que ya avanzó un peldaño con la ejercitación SAR (sigla inglesa Search and Rescue, traducido Búsqueda y Rescate) que ambas Marinas llevaron a cabo en instalaciones de la Base Naval de Puerto Belgrano entre el 26 y 27 de febrero pasado. De un ejercicio de tablero o “mesa de arena”; en la jerga de los uniformados; ahora los negociadores buscarán sentar las bases para llevar las maniobras al escenario real del Atlántico sur con navíos de los dos países.

La Armada Argentina es el organismo responsable que entiende en la salvaguarda de la vida humana en el mar, su asistencia y salvamento en la Región de Responsabilidad SAR de la República Argentina (RASRR) establecida por la Organización Marítima Internacional (OMI). Las operaciones SAR están por fuera de reclamos de soberanía, los Estados tienen la obligación de asistir a llamados de socorro conforme el mandato de la OMI. Hay tres Centros de Coordinación de Rescate Marítimo: en Puerto Belgrano, Buenos Aires y Ushuaia. En las islas Malvinas hay un Subcentro Coordinador que reporta las notificaciones de socorro al Centro Coordinador de Ushuaia.

Urge retomar esas prácticas, cada año se incrementa más el tráfico de cruceros turísticos hacia la Antártida y la presencia de pesqueros en el borde de la Zona Económica Exclusiva y con él los riesgos de incidentes y naufragios.

Otro costado de la actividad marítima en el Atlántico sur que no está previsto en las conversaciones es el monitoreo e intercambio de información de movimiento de pesqueros que bordean la denominada Milla 201. Estimaciones de la subsecretaría de Pesca y del Instituto Nacional de Investigaciones Pesqueras (INIDEP) hablan de unos 600 a 800 millones de dólares anuales perdidos por la captura no declarada de calamar.

Sí se encaró una reciente política de cooperación científica bilateral para evaluar el stock de la especie calamar argentino (illex argentinus) que también es pilar en la economía de las Islas. Conocer de antemano quiénes y dónde están pescando facilitaría la respuesta rápida de la Armada y la Prefectura ante una intrusión en la ZEE. Los datos pueden sensibilizar el humor del gobierno isleño. La vicepresidente Gabriela Michetti en la reciente gira por España se reunió con los máximos referentes del sector pesquero de ése país. Uno de los puntos tratados fue la situación de la flota pesquera española en la Milla 201 y el rol que juega en la Pesca Ilegal No Declarada No Reglamentada porque muchos de pesqueros que operan allí con licencia de Malvinas son españoles.

El encuentro del dúo Vila-Hutton tuvo un anticipo ayer en modo de conferencia del delegado británico. Expuso a puertas cerradas en la Universidad de la Defensa Nacional (UNDEF) entidad de altos estudios dedicada a la formación de militares y civiles en áreas disciplinarias vinculadas con la defensa y la seguridad nacional. La hoja de ruta de hoy contiene entre otros asuntos; cooperación logística en la Antártida, intercambio de personal, sanidad militar y un ofrecimiento para cursantes militares en el Royal College of Defence Studies, institución de estudios a la que asisten militares y civiles británicos seleccionados para liderazgo. El alto costo de la matrícula más gastos de traslado y viáticos de los presuntos aspirantes tornan imposible la oferta. También se tratará con sordina el estado de los repuestos militares adquiridos a proveedores británicos. A pesar de que se flexibilizó el embargo subsisten demoras en insumos destinados a la Armada.(Source/Photo/Author: Edgardo Aguilera/Ambito.com)