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miércoles, 24 de mayo de 2017

Un francotirador inglés mató a un miembro del ISIS que estaba a 2.400 metros de distancia

Con el fusil más potente del mundo

Fue en Mosul, Irak. La bala viajó tres segundos y se incrustó en la garganta del mercenario. El fusil que usó el británico vale 15.000 dólares


Todo sucedió en Mosul, Irak. De un lado un oficial del SAS, el Servicio Aéreo Especial británico. Del otro un yihadista, un mercenario del ISIS. El extremista, ubicado en un edificio, usaba un fusil Dragunov ruso. Un arma letal por su precisión. Y así iba matando enemigos que caían uno tras otro.

El oficial inglés entabló un duelo con él. A la distancia. Se escondían y cambiaban de posición incesantemente. Hasta que quedaron separados por 2.400 metros. Traducción: unas 24 cuadras de las nuestras. Pero las miras telescópicas servían para que uno y otro se vieran las caras.

El inglés esperó y esperó. Confió en lo que tenía entre sus manos. Un fusil CheyTac M2000, el arma más poderosa del mundo en su tipo. Su alcance es de tres kilómetros y su costo en el mercado ronda los 15.000 dólares.
El rifle CheyTac M2000. El arma más poderosa del mundo en su tipo. Cuesta 15.000 dólares.

En un momento dado la paciencia pareció darle frutos al oficial inglés. El miembro del ISIS se dejó ver cuando la luz del día estaba desapareciendo. El inglés lo tuvo en la mira y apretó el gatillo. La bala voló durante tres segundos y se incrustó en la garganta del yihadista.

Nunca se había registrado una muerte con un disparo de bala a esa distancia. Con un fusil que el ejército inglés no usa, pero sí el estadounidense. Se comenta que le fue prestado al británico por su hoja de servicios. Veterano de las guerras en Irak y Afganistán, sería hoy por hoy, el mejor francotirador del mundo.

El fusil Dragunov que usaba el mercenario del ISIS.

La historia fue relatada al Daily Star Sunday por otro soldado que estuvo presente en este juego del gato y el ratón entre el inglés y el yihadista. Y contó: "El británico tuvo en su mira varias veces al francotirador, pero no pudo conseguir un disparo claro. Cuando hay tanta distancia entre el tirador y el objetivo hay muchos factores que pueden hacer que el disparo falle. Pero cuando el otro se dejó ver unos segundos, no falló".

Fuente: Clarín

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