Pages - Menu

viernes, 8 de enero de 2016

Ecuador y la modernización de sus Fuerzas Armadas

Por Erich Saumeth

Con inversiones para el año 2015 cercanas a los 1.093 millones de dólares, las Fuerzas Armadas ecuatorianas, gracias a la labor que en este sentido ha emprendido el Ministerio de la Defensa, siguen en la ruta de la modernización progresiva de sus sistemas, así como en una intensa reorientación doctrinal dirigida a implementar una política de seguridad acorde a los escenarios presentes y futuros.

En este sentido,el titular de Defensa de este país, Fernando Cordero, ha insistido en que ha sido precisamente la Administración del actual presidente, Rafael Correa, la que en los últimos ocho años ha venido impulsando y apoyando desde el punto de vista presupuestal los procesos de mantenimiento, actualización, renovación y modernización de las Fuerzas Armadas de esta nación, que en el período comprendido entre los años 2000 a 2006 vieron reducidas y mermadas ostensiblemente sus capacidades.

Las afirmaciones del ministro Cordero hacen referencias a las inversiones, que calculadas en aproximadamente 1.700 millones de dólares, se le han inyectado al sector defensa en estos ocho años, cifras casi seis veces superiores a las invertidas por los anteriores Gobiernos en períodos de tiempo similares y que alcanzaron cerca de 300 millones de dólares.

Para las dos próximas vigencias fiscales -años 2016 y 2017- el ritmo de recursos seguirá en aumento, esperándose que el sector de la defensa y de la seguridad reciba sumas en torno a los 1.558 millones de dólares, con las cuales podrán financiarse diversos proyectos ya previstos, dentro de una estrategia que enmarcada en una nueva doctrina de seguridad integral busca poder contar con los medios necesarios para garantizar la soberanía nacional, apoyar el desarrollo del país y aportar a la estabilidad regional e internacional.

Fuerza Aérea

Estas afirmaciones efectivamente se han traducido en el desarrollo de proyectos con los que, en primer lugar, se ha buscado la repotenciación de la Fuerza Aérea, cuyos principales vectores de caza, así como medios de transporte, habían llegado al límite de su vida operacional y cuyo mantenimiento –o modernización- no se justificaba desde el punto de vista fiscal dado la negativa relación coste/beneficio.

Por ello y para el 2011 el Gobierno ecuatoriano entregaba a su Fuerza Aérea (FAE), una docena de interceptores de la compañía Sudafricana Denel Aviation, los Atlas Cheetan C/D-III, aeronaves de 3.5ª generación adquiridas por valores cercanos a los 80 millones de dólares y que entraban a sustituir a tres diferente modelos hasta esos momentos en servicio en la FAE.

Esta institución fue además reforzada con la incorporación para el año 2010 de 18 aviones LIFT´S de la brasileña Embraer y del tipo EMB-314 Super Tucanos, con los cuáles, tanto el Ministerio como la Fuerza Aérea han insistido en reofrzar las operaciones antinarcóticos y antiterroristas, particularmente en áreas fronterizas y en donde organizaciones criminales transnacionales realizan actividades ilícitas.

Así mismo, y siguiendo la línea de modernización de las diferentes alas de la FAE, el Gobierno ecuatoriano negoció con el grupo europeo Airbus la compra de tres aviones de transporte táctico del tipo CASA C295 para finales del pasado 2014.

Igualmente, la Fuerza Aérea pudo adquirir doce nuevos entrenadores primarios ligeros para los procesos de instrucción de sus futuros pilotos, escogiendo el avión Diamond DA20-C1, modelo caracterizado por su fiabilidad y bajos costos por hora de vuelo.

El Ministerio de la Defensa ecuatoriano no ha descuidado tampoco la modernización de la flota de helicópteros de sus Fuerzas, con la compra y despliegue de modelos como los Dhruv de la compañía India HAL –por 45 millones de dólares- cuya operatividad fue cancelada epor una serie consecutiva de accidentes.

En esta misma línea, desde el 2012 han venido incorporándose helicópteros del tipo Eurocopter AS350 (del grupo Airbus) y anunciándose durante el 2015 negociaciones precisamente con Airbus para la compra de nueve unidades de un tipo no especificado.
También se han venido impulsando los programas que se adelantan para el desarrollo del vehículo aéreo no tripulado (ART) Gavilán-II, así como para modernizar y optimizar el sistema de vigilancia aérea, con la compra a la compañía española Indra, de radares a finales del año pasado.

Armada

La Armada del Ecuador ha venido también proyectando de manera planificada la repotenciación de sus diferentes plataformas, siendo la modernización de sus submarinos de la clase Shyri objeto de sendos procesos mayores de modernización efectuados entre los años 2008 y 2014 por el astillero chileno ASMAR y por valores cercanos a los 125 millones de dólares, estando en la actualidad a plena capacidad operativa sus dos unidades, gracias a una recuperación y ampliación de sus sistemas que incluyeron la repotenciación de sus plantas motrices y el reforzamiento de sus sistemas de detección y armas.

La Armada quiere continuar adelantando iguales procesos, pero en este caso con las fragatas misileras de la clase Condell, adquiridas de segunda mano en el 2008, con la intención de ampliar en varios años sus servicios y continuar creando doctrina operacional en el uso y despliegue de este tipo de embarcaciones.

Además, y en este mismo sentido, han comenzado los trabajos de mantenimiento y actualización de los sistemas de propulsión, navegación y armas de las corbetas Misileras de la clase Esmeralda, que en número de seis unidades constituyen la punta de lanza de esta fuerza. Estos trabajos los adelanta el astillero nacional Astinave, asistido tecnológicamente por su par holandés DAMEN.

Las intenciones de la Armada son las de contar con unidades navales con las cuáles ejercer también un control más efectivo sobres sus espacios marinos, protegiendo recursos y persiguiendo actividades delictivas, contando para ello con embarcaciones que puedan realizar estas labores de manera efectiva y recurriendo a la industria nacional –Astinave- para el diseño y desarrollo de las plataformas –lanchas patrulleras-  de los tipos 5009 y 2606.

De la misma forma se han reforzado las operaciones logísticas para asistir al Archipiélago de las Galápagos, ubicado en el pacifico ecuatoriano a una distancia de 972 kilómetros de la costa, adquiriendo para ello una nueva embarcación, bautizada con el nombre de 'Manizales', con capacidad de 7.000 toneladas y construida por el astillero español TEX,. Se trata del primero de dos unidades de este tipo y ha sido desarrollado gracias a gestión y recursos directos de la presidencia de esta nación.

Ejército

En cuanto al Ejército, quizás uno de los puntos más importantes para esta institución es el proceso, que se extendería hasta el 2025, que se ha iniciado para disminuir el número de sus efectivos, tanto regulares como conscriptos, así como el número de cuarteles y bases con el objeto de constituir una fuerza muchos más compacta y profesional para desarrollar la doctrina de seguridad integral de cara a los nuevos escenarios en seguridad que a nivel regional vienen planteándose.

En relación al tema de adquisiciones, lo más destacable es la renovación del parque automotor para esta institución, gracias a acuerdos que en este sentido fueron firmados con China cercanos a los 80 millones de dólares, que le permitirán a esta fuerza contar con vehículos de los tipos Howo Truk 4x4 y 6x6 con los que recupera una importante capacidad logística y operativa.

Estas adquisiciones son productos de la consolidación de alianzas que en materia de defensa y seguridad viene firmando el Gobierno ecuatoriano a través de su Ministerio de Defensa con países como China y Bielorrusia, con los que se busca adquirir material de primer nivel y transferencia tecnológica para el desarrollo de sistemas en el Ecuador, particularmente de UAV, vehículos y helicópteros.

Este interés se ha reforzado, además, con la visita a países vecinos como Brasil, nación con la que se fortalecieron los lazos en defensa, principalmente en asuntos relacionados con la ciberdefensa, que se han traducido en un programa propio por medio de la creación de una unidad operativa en esta materia con la que se busca blindar al país de posibles amenazas o ataques informáticos.

También se han realizado visitas a Chile, en este caso en busca de adquirir tecnología con el objeto de de mejorar y perfeccionar la elaboración de armas ligeras –principalmente revólveres- para aplicarlos a los procesos de fabricación de la empresa Santa Bárbara y permitir el desarrollo de los cañones de las armas que vienen importándose.

Policía

La Policía también ha sido objeto de atención por parte del Gobierno ecuatoriano, que ha empezado un nuevo proceso de equipamiento básico y de protección personal para los efectivos de esta institución.

En este sentido, la Policía ha recibido 1.000 chalecos antibalas, 75 radios de comunicación y 15 coches patrulla en el marco del programa Sumando Esfuerzos por la Seguridad, que pretende aumentar los niveles de seguridad y convivencia ciudadana en el país a través de las actuaciones de las Unidades de Policía Comunitaria (UPC).

La intención es poder seguir, en lo que a seguridad urbana se refiere, disminuyendo los índices de homicidios y de hurtos, para lo cual se ha estimado necesario dotar a la Policía con los elementos necesarios, valorados en este caso en cerca de unos 1,8 millones dólares.

Todos estos procesos de modernización emprendidos entonces por el estamento militar ecuatoriano, dirigidos a la actualización de sistemas y a la ampliación de las capacidades operacionales de sus diferentes fuerzas, tiene un objetivo común, que no es otro que la modernización desde el punto de vista tecnológico de los sistemas y equipos de las Fuerzas Armadas.

Este ha sido un proceso respaldado ampliamente desde el punto de vista presupuestal y fiscal, que ha logrado la progresiva sustitución del material en servicio (con mayor énfasis en algunas de las fuerzas), así como con la constitución de una institución castrense más pequeña pero más profesional, más capacitada y mejor dotada, que pueda hacer frente y contrarrestar las amenazas derivadas de los –reiteramos- nuevos escenarios a nivel regional y al mismo tiempo con las capacidades para actuar en el marco de misiones de paz bajo el mandato de organizaciones internacionales como la OEA y las Naciones Unidas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario