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miércoles, 30 de septiembre de 2015

Fuerza Aerea en crisis





La sensación que envuelve a la Fuerza Aérea Argentina es la incertidumbre.
Dentro del marco del ejercicio “Ariete”, la última escuadrilla en servicio del Sistema de Armas Mirage comenzó su gira patagónica de despedida. El aparato que cumplió recientemente 42 años en la fuerza inicia su largo y difícil final, el cual se oficializaría en los últimos días de Noviembre del año 2015.
Este final no es un final pomposo, con un aire de ceremonia y con la presentación de la vieja y la nueva guardia, un nuevo cazabombardero como muchos hubiéramos querido, sino un final de esfuerzo, sacrificio, orgullo y un ciclo que posiblemente no se vuelva a repetir en la Fuerza Aérea.
La recorrida de “Ariete” tuvo como origen el despliegue aeromóvil de la 6ta Brigada Aérea de Tandil, Provincia de Buenos Aires hasta la Base Aérea Militar Rio Gallegos, en la provincia de Santa Cruz, a aproximadamente 1700kms de distancia en el sur argentino. Este operativo logro desplegar , y a su manera despedirse de sus compatriotas, a los 3 últimos aparatos en servicio, Mirage 5 “Dagger” biplaza, Mirage IIIDA y Mirage 5 “Finger”, para el disfrute de chicos y no tan chicos, de una aeronave tan particular como el “espejismo” francés en las ciudades de El Calafate, Rio Gallegos y Ushuaia.
Rio Gallegos tiene el muy especial recuerdo de ser uno de los aeródromos en 1982 donde estos y muchos otros aparatos despegaron hacia la gloria durante el Conflicto del Atlántico Sur, el cenit profesional de nuestra Fuerza Aérea y sus 55 héroes.
El día viernes 11 de septiembre, este operativo llego a su fin, pero previo al regreso se detectó un grave incidente en el motor del Mirage 5 “Finger” C-408. El mismo le fue retirado e inmediatamente y el análisis arrojo la información que todos temían: un problema insalvable del motor que de no haber sido detectado antes podría haber resultado en una tragedia. Estos motores, algunos de ellos armados en base a partes en buen estado de otros que ya no se encuentran operativos, eran la razón por la cual solo 3 aparatos se encuentran en servicio en la Fuerza Aérea Argentina. Rápidamente los “magos”, el Grupo Técnico 6, encargado del mantenimiento de los Mirage, se puso a trabajar al respecto. El personal que se encontraba en la Base Aérea de Tandil logro armar y recuperar un motor de los todos componentes que disponían. El KC-130, “TC-70”, afectado al apoyo de esta Operación, fue a retirar el mismo y gracias a la extensa experiencia del personal técnico, el C-408, pudo regresar a su hogar. Serian pocas mis palabras para describir la importancia de estos silenciosos hombres. Me viene a la mente la frase de Winston Churchill durante la Batalla de Inglaterra en 1940: “nunca en la historia del conflicto humano, tantos le debieron tanto a tan pocos”.
A partir de mediados de este año, el Grupo Técnico 6 comenzó el proceso de adaptación a sus nuevos medios: 3 aeronaves de entrenamiento avanzada IA-63 “Pampa Serie II”, los cuales operaran desde la Base Aérea de Tandil.
A partir del mes de Diciembre de 2015, la Fuerza Aérea Argentina y por ende la Nación, se queda sin un vector de intercepción supersónica de “todo tiempo”. El peso de ser la primera línea de defensa recae en los aviones A-4Ar “Fightinghawk” basados en la localidad de Villa Reynolds, provincia de San Luis. Estos son cazabombarderos subsónicos son una variante actualizada del A-4M “Skyhawk II” que incorporan aviónica moderna y sistemas de un F-16 “Falcon”. Incorporados a la FAA a mediados de la década de 1990, son una solución de compromiso ante la negativa en ese momento a la venta de los F-16 de parte de los Estados Unidos, los cuales habían sido recientemente desprogramados. El A-4M se destaca por haber sido utilizado por el Cuerpo de Infantes de Marina de los Estados Unidos (USMC) hasta la década de 1990 y de parte de la Fuerza Aérea Israelí, en la cual actualmente continúa operando como aeronave de entrenamiento hasta el despliegue final de los recientemente adquiridos Aermacchi M-346. El A-4M también presta servicio en la Marinha Brasileira como parte del grupo aéreo embarcado del Portaaviones A-12 “Sao Paulo”. Este se encuentra en proceso de actualización de parte de la empresa EMBRAER a un estándar comparativamente similar al de nuestros A-4Ar.
Sin embargo la situación de estos aparatos tampoco es tan distinta a la sufrida por el sistema de armas “Mirage”. Desde su incorporación la compra de repuestos y soporte para su operación ha sido totalmente insuficiente, lo cual ha obligado a poner en conservación a más de la mitad de la flota. Este estado implica el desarmado parcial de componentes, junto al retiro de líquidos del aparato, el cual luego es recubierto por una lona especial y así ser protegidos de los efectos ambientales. Este estado en el caso de ser necesario, puede ser revertido rápidamente. Algunos de estos aparatos tienen la misma o incluso mayor antigüedad que varios de nuestros Mirage más modernos recientemente desprogramados.
La falta de estos insumos necesarios se suma a algunos de los problemas encontrados en los aparatos, incluyendo casos de corrosión, lo cual puede determinar a algunos de ellos como irrecuperables. Los A-4Ar regularmente se van rotando en el proceso de conservación, para así ir gastando uniformemente las horas disponibles y por ende el desgaste de los mismos en toda la flota. Generalmente no existen más de 3 en servicio al mismo tiempo y existen serias dudas acerca de la disponibilidad de su armamento lanzable aire-aire, el cual requiere mantenimiento regular para encontrarse operativo.
El 29 de Septiembre, el Suboficial Principal David Peñaloza, perdió su vida mientras realizaba una prueba de motor en el A-4Ar, Matrícula C-933, el cual tampoco hay certezas de que pueda regresar a servicio debido a los daños recibidos. Una situación irreparable que golpea aún más a una fuerza vapuleada anímica y materialmente.
El ultimo eslabón de la aviación de combate pura es el IA-58 “Pucara”, este avión de producción nacional también veterano del Conflicto del Atlántico Sur tiene una limitada operatividad por motivos económicos agravados por el fin de la cadena logística de la empresa productora de sus motores, Turbomeca. Los Turbomeca Astazou XVI-G del aparato se encuentran en un proceso de reemplazo del mismo de parte de la Fabrica Argentina de Aviones (FAdeA). FAdeA recibió asistencia de Israel Aircraft Industries (IAI) para la integración del nuevo motor elegido, el Pratt & Whitney Canada PT-6A 62. Actualmente el IA-58, matrícula AX-561, se encuentra realizando pruebas previo a su primer despegue con esta nueva propulsión la cual da nombre entonces al estándar “Hotel” o IA-58H. Sin embargo las pruebas y una modificación a todos los aparatos disponibles puede demorar incluso una década, lo cual afecta la disponibilidad de aparatos inmediata sumado a que el equipamiento actual, aunque parcialmente subsanado con la propuesta de actualización “Echo” o IA-58E, de equipos obsoletos o que se encuentran desfasados en relación al campo de batalla actual.
Esta es la situación general de la aviación de caza y ataque. Sin embargo, el panorama no se modifica mucho en el conjunto de la Fuerza Aérea y en muchos casos, directamente empeora. Es en vano hablar exclusivamente de los sistemas de armas cuando evitamos nombrar a la variable que más lo influye, el hombre. La situación a nivel recursos humanos en la FAA es crítica. Partiendo de la base, Los Cadetes de la Escuela de Aviación Militar (EAM) y los Aspirantes de la Escuela de Suboficiales de la Fuerza Aérea en la provincia de Córdoba, aun en su gran mayoría, no han recibido sus uniformes. Los mismos realizan sus estudios utilizando el equipo de gimnasia, un claro golpe al orgullo y el sentido de pertenencia que representa este uniforme, algo elemental en cualquier fuerza armada. La motivación en todo caso se ve desafiada permanentemente cuando se toma en consideración un futuro el cual no pueden prever y si analizan la situación actual de la cual son testigos no resulta difícil comprender el hecho de que muchos de ellos resulten pidiendo la baja. Es similar el caso dentro de los oficiales y suboficiales activos en la fuerza. Estos profesionales formados y especializados son permanentemente captados por el mercado privado, el cual les permite realizarse profesionalmente de la manera en que la actualidad de la fuerza no lo logra y al mismo tiempo paga sueldos muy superiores.
Aunque las comparativas resulten odiosas, una Fuerza Aérea, como bien dice su nombre, se precia de ser por lo que vuela. El número de horas de vuelo llego a las aproximadamente 126.000 en la década de 1970, presumiblemente con motivo de los conflictos regionales y la dictadura militar y, sin embargo, este hecho trajo a colación la destacadísima labor de los aviadores en el Conflicto del Atlántico Sur en 1982. Muchos de estos, inclusive los mas jóvenes, tenían un promedio de horas superior o comparable al de las primeras fuerzas aéreas en el mundo. Inclusive en la década de 1980, este número de horas se había visto reducido en un 10%. Con el regreso de la democracia y el enfriamiento de los conflictos regionales hasta el final de la década, el número había bajado a 85.000. Con el final de la Guerra Fría y la importante reforma en las Fuerzas Armadas, el promedio durante la presidencia de Carlos Menem era de 70.000 horas, las cuales al final de su mandato habían bajado a 60.000. En este caso, con la consiguiente reducción de medios, los cuales en su gran mayoría fueron desprogramados sin reemplazo, llegamos a las 27.000 hs en 2015 para la friolera de 19.000 en 2016. Estas reducidas horas han sido muy caras para la Fuerza Aérea Argentina. El Estado Mayor General de la fuerza en los últimos años reestructuro su presupuesto con el motivo de maximizar la cantidad de las mismas. Estos fondos habían sido derivados de programas de mantenimiento, equipamiento, racionamiento, uniforme e incluso hasta los servicios públicos que se consumían. Producto de esta situación, ha trascendido entre otras, la falla de los ascensores del emblemático edificio Alas, en pleno microcentro porteño, el cual es hogar de cientos de familias de la Fuerza Aérea. Este polémico hecho, junto a la reducción del razonamiento y las horas de servicio, ha afectado al Estado Mayor de la fuerza, por lo que el Brigadier Mayor “VGM” Mario Roca, Comandante de Adiestramiento y Alistamiento, el dia Viernes 25 de Septiembre ha solicitado su pase a retiro claramente desgastado por toda esta situación. Para quienes no lo sepan, el Comandante de Adiestramiento y Alistamiento es quien conoce al detalle la situación de todos los medios de la fuerza, fíjense en todo caso si es menor la labor que tuviera que realizar.
Teniendo en cuenta la delicada situación actual se destaca la imperiosa necesidad de resolver las falencias mas básicas, incluyendo el reequipamiento y compra de soporte, repuestos e insumos para las aeronaves de la fuerza, la compra de 3 helicópteros Mi 171 ya ofrecidos por la Federación Rusa, la reposición de stock de munición y actualización de la artillería antiaérea junto a una adecuación de las horas de vuelo para el próximo año. Actualmente el presupuesto de las Fuerzas Armadas, es uno de los más bajos en su historia, rondando el 0.72% del PBI, según datos del INDEC.
Esta política de reducción de la financiación del instrumento militar para las FF.AA. viene arrastrándose desde mediados de la década de 1980, lo que ante análisis tanto del propio MinDef como de distintos consultores, puede resultar en la necesidad de invertir una cifra entre los 15.000 y 20.000 millones de USD en conceptos plurianuales simplemente por el hecho de brindar estabilidad al equipararse regionalmente en un contexto en el que la Argentina hoy día es el eslabón más débil.
A grandes rasgos, la prioridad del Ministerio de Defensa se destacó en el mantenimiento de la empresa Líneas Aéreas del Estado (LADE), la cual es operada por la Fuerza Aérea Argentina y por ende, el consumo de las horas de vuelo junto a los costos de mantenimiento, se descuentan de este número global de 27.000 hs para el año 2015, lo cual resta aún más las horas asignadas a la aviación de combate. No solo LADE hace uso de estas horas, las cuales también se utilizaron durante la campaña del Ministro Rossi, entonces precandidato a Presidente de la Nación para las elecciones primarias nacionales, en el Learjet 60 de la Fuerza, que se encuentra para el uso institucional del MinDef. Actualmente LADE opera un solo aparato Fokker F-28. Estos se encuentran al límite de su vida útil, por lo cual el Estado Nacional ha autorizado la utilización plurianual de fondos por 678.300.000 M de pesos a través del decreto 1775/2015. Este monto corresponde a la aplicación de un crédito blando facilitado por la Organización Internacional de Aviación Civil (OACI), el cual se utilizaría para la incorporación vía leasing de 2 aeronaves EMBRAER ERJ-135 los que brindarían servicio en la Patagonia argentina. Sin embargo existe polémica ya que el lessor, basado en Miami, tendría vínculos con la organización política oficialista “La Campora.”
La FAA ya habría querido desprenderse de LADE, mas considerando el control del Estado Nacional sobre la aerolínea de bandera, Aerolíneas Argentinas, pero esto fue rechazado de plano de parte del MinDef. AR o en su defecto Sol Líneas Aéreas en el caso de una falla en alguna de las 7 escalas que actualmente realiza LADE, suelen hacerse cargo de los pasajeros a lo cual LADE debe abonar también la diferencia por el alojamiento de los pasajeros afectados además del ajuste del traspaso del pasaje a otra compañía. El transporte medio en la Fuerza Aérea se ve disminuido actualmente ante la inminente salida de servicio del último de los Fokker F-27 en servicio actualmente, estos aparatos incorporados a partir del año 1968 cumplieron roles de transporte militar, enlace y así como de fomento. Recientemente se hizo llegar una oferta por los aviones ATR-42 utilizados recientemente por la ahora quebrada empresa aérea uruguaya BQB, administrada por el empresario Juan Carlos López Mena, pero la misma ha sido rechazada por el estado de los aparatos. También se encuentra sobre la mesa en este momento una propuesta de Airbus, por2 ATR-72, solicitados originalmente por una aerolínea europea para vuelos cortos pero no incorporados a su flota, sin embargo estos no serían de la preferencia de la fuerza quien busca primordialmente modelos militares acorde a sus necesidades específicas.
Aunque la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) se encuentra desde el año 2011 bajo órbita del Ministerio del Interior y Transporte en lugar de la Fuerza Aérea, la aviación civil aún tiene una injerencia importante en la FAA. Es una de las prioridades del Ministerio de Defensa, el mantenimiento en condiciones operativas permanentemente de las aeronaves verificadoras VR, en este caso operando en una plataforma Learjet 35 desde la Base Aérea de Paraná, en la provincia de Entre Ríos. Este hecho no responde puramente a una necesidad militar sino a la relevancia que los aparatos tienen en la verificación de radioayudas de los aeropuertos nacionales, los cuales de no estar en condiciones, perjudicarían la calificación de los mismos y por ende, la imagen de la República Argentina, al menos así es entendida por el Poder Ejecutivo.
¿Cuál es el propósito de la Fuerza Aérea Argentina para el Estado Nacional y los dirigentes políticos más representativos de la población? También vuelve a aparecer en este caso la incertidumbre, la famosa “niebla de guerra” que no permite avistar el futuro cercano y francamente, sin saber que esperar y que pretender así el futuro gobierno tuviera como Comandante en Jefe a Daniel Scioli, a Mauricio Macri o a Sergio Massa.
El decreto 1775 también habilita el endeudamiento sobre el proceso de incorporación de una aeronave como reemplazo de los Mirage, por un valor total de 2.158.911.416 pesos. Al tipo de cambio actual una cifra de aproximadamente 210 millones de dólares. Aunque se presume que el mismo hace alusión a los IAI Kfir Block 60 ofrecidos por la empresa Israelí, este monto resultaría insuficiente para la incorporación de los 14 aparatos ofrecidos por Israel, a un costo aproximado de 25 millones de dólares por unidad. Sumado el compromiso de compra de armamento guiado aire – aire y aire – tierra junto al soporte necesario de los aparatos en contratos futuros y no así el paquete inicial, este incluye la adecuación de la infraestructura del Área Material Rio Cuarto (AMACUAR) en la provincia de Córdoba y la 6ta Brigada Aérea de Tandil, Provincia de Buenos Aires. Sin embargo Israel ofrece aparatos biplaza de los cuales no dispone y el convenio incluiría la conversión de 2 de nuestros Mirage biplaza desprogramados o en proceso de, lo que no podría justamente resultar positivamente para la fuerza teniendo en cuenta lo extensivo de la modificación y los trabajos necesarios, sin embargo, Israel presiona fuertemente y seria FAdeA entonces quien suscribiría el convenio, siendo lessor de la Fuerza Aérea tal y como ya lo realiza con los Grob 120TP, una maniobra cuanto menos dudosa y polémica. No sería la primera vez que un convenio con representantes del Estado de Israel saliera mal o no como ellos lo comunicaran, tal y como sucedió con la venta de los A-4E israelíes en pleno Conflicto del Atlántico Sur para la Aviación Naval argentina, los cuales nunca llegaron y un monto importante de los 90 millones de dólares de la operación, nunca fueron restituidos a la Argentina. Es importante el incentivo a FAdeA para realizar este acuerdo, ya que IAI propuso comercializar internacionalmente 20 aparatos IA-63 Pampa “Serie III” de nueva manufactura. IAI está al tanto del avance de este proyecto ya que algunas de sus subsidiarias incluyendo otras empresas del estado israelí, son proveedoras directas del aparato, el cual se encuentra por entregar su primer aeronave de la nueva línea de montaje, la anterior fue cerrada en 1992 previo a su concesión a Lockheed Martin. Vale destacar que la relación entre FAdeA y la FAA no es buena, ya que se han suscitado distintos problemas en el último tiempo, lo cual ha generado malestar al Brigadier General Callejo en particular.
Aunque esto sería bueno para la producción nacional y más considerando el bajísimo presupuesto operativo de la FAA la cual podría recibir mas no bien operar en tiempo y forma, es polémico el hecho ya que IAI tendría intereses encontrados con Aermacchi, su socio en la producción bajo licencia del M-346 “Master” en Israel, esta empresa compite directamente con el IA-63 Pampa con el M-345 y para peor, los IAI Kfir no serían propiedad argentina tampoco sino aun de IAI y con el consiguiente problema legal y diplomático si hubiera una situación de combate utilizando estos aparatos. Es entonces la intención de la Fuerza Aérea de rechazar este convenio y con nuevos aires y una nueva administración, resolver este hecho con un respaldo político y posiblemente económico, mayor junto claro esta a mayores ofertas. A futuro la FAA busca como ya se ha expresado oficialmente, adquirir los JAS-39E/F “Gripen NG” a ser producidos bajo licencia por EMBRAER, sin embargo de seguir adelante para que esto pueda materializarse con los colores argentinos faltaría aproximadamente una década, realmente mucho tiempo ante el panorama actual. El gobierno nacional ha invertido mucho en sus relaciones con Israel, distintos contratos de municiones, armamento guiado y provision de sistemas son testigo de ello, sin embargo, internamente se ha demostrado preocupacion de parte de lo que la oposicion podria interpretar como procesos de contratacion directa y lo que el gobierno se ha esforzado en demostrar como acuerdos gobierno a gobierno, en un proceso tradicional, el Estado Argentino esta obligado a realizar una licitacion publica internacional por estos equipamientos y los casos de contratacion directa deben ser una excepcion bien justificada, como parte tambien de los procesos burocraticos para combatir la corrupcion y de transparencia, firmados en acuerdos internacionales.
Aparte de la incertidumbre, como al inicio este artículo, distintas sensaciones se presentan en el personal y en el sentir de la fuerza, miedo con la consiguiente crisis de mando, ya que una reprimenda o una medida mal entendida puede resultar en acciones administrativas e incluso la baja del personal bajo investigación, lo cual condiciona la verticalidad, estructura central de cualquier Fuerza Armada.
Sin embargo no todas son malas noticias en la Fuerza Aérea, seria deshonesto no reconocer la relevancia de la incorporación de los helicópteros Mi 171E, los nuevos Bell 412SP, el anuncio por los 6 Airbus H125 y la modernización de los C-130 “Hércules”, de los cuales el TC-69 ya se encuentra en proceso en las instalaciones de L-3 en Texas, Estados Unidos. También es importante destacar que la incorporación y mejora de estos medios no es casual, el Poder Ejecutivo hace gran uso de la flota de alas rotativas de la fuerza con fines proselitistas y de la aviación de transporte. Lamentablemente solo estos silenciosos guerreros reciben el apoyo que todo el parque aéreo precisa, en lo cual es claro el detrimento de la aviación de combate neta. El Presupuesto para el año 2016 garantizara indiscutidamente la operación de los aviones de entrenamiento Grob 120TP, bajo el régimen de leasing desde la Fabrica Argentina de Aviones (FADEA) junto a los 2 EMBRAER ERJ-135 adjudicados para LADE y la aviación de transporte de “interés público” ¿pero el resto?

Federico Luna - Zona Militar

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