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martes, 18 de agosto de 2015

Rafale: Elegancia, tecnología y funcionalidad

Rafale, un avión hecho para el combate en primera líneaDesde su concepción inicial, los ingenieros de Dassault se aseguraron de que el Rafale ofrecería niveles de fiabilidad, compatibilidad, capacidad de prueba, sostenibilidad y capacidad de despliegue sin precedentes. Consideraciones de los clientes del Mirage 2000 y la idea de alta disponibilidad han influido en el diseño de la aeronave desde el principio del programa haciendo que ​​el Rafale haya fijado, sin duda, nuevos estándares de fiabilidad y mantenibilidad. Gracias a las tecnologías avanzadas, la disponibilidad del Rafale ha aumentado significativamente en comparación con la de los Mirage 2000, un avión que ya en su momento había establecido nuevos estándares en todo el mundo. 

El Rafale fue concebido para operaciones navales, algo de lo que incluso las variantes basadas en tierra de la fuerza aérea se benefician como ser una estructura altamente resistente, la excelente protección contra la corrosión y el tratamiento para resistencia electromagnética

El Rafale se ha construido para durar y para ello cuenta con un sistema totalmente automático dedicado al monitoreo estructural que proporciona un seguimiento individual de los componentes del fuselaje, lo que facilita la vigilancia del índice de fatiga durante toda su vida útil. Todos los sistemas son monitoreados en tiempo real por el Sistema de Monitoreo de Uso Integrado (Integrated Health and Usage Monitoring System, IHUMS) que garantiza la detección de fallos sin ambigüedades.Este sistema de control totalmente automático ayuda a reducir los tiempos de respuesta al facilitar la solución de problemas y reparación, minimizando drásticamente la necesidad de equipos de apoyo en tierra. 

Dassault desde el inicio ha desarrollado un cazador muy sencillo con detalles que quizás pasan inadvertidos como entradas de aire fijos y la ausencia de freno aerodinámico, ayudando a reducir aún más los requisitos de mantenimiento. Con el Rafale, Dassault ha sido pionera en el uso de los avances revolucionarios, como el empleo de sistemas hidráulicos de muy alta presión (350 BAR / 5000 PSI) y los alternadores de frecuencia variable que aseguran fiabilidad y seguridad a los sistemas eléctricos. Estos avances han tenido tanto éxito que se han adoptado como estándar por otros fabricantes de aviones como Airbus en el A380/A350 y Boeing en el B787 entre otros. 

Las fuerzas armadas francesas son expertos en la guerra expedicionaria y requieren sistemas que pueden ser fácilmente desplegadas en un muy corto plazo, lejos de su infraestructura de apoyo nacional, como se ha demostrado durante las operaciones en Libia, Mali e Irak. 

Como resultado directo, Dassault y sus socios han aprovechado de su indiscutible 'know-how' para desarrollar un luchador con una estructura logística extremadamente baja para su operación. Esta es una ventaja crucial que resultará no solo en facilidad de mantenimiento lejos de casa para el Rafale, sino también en menor carga de traslado para los activos de transporte aéreo estratégico. Por ejemplo, no es necesario bancos de prueba de motor para los Snecma M88. 

Además, gracias a las tecnologías y calidad de fabricación y técnicas de montaje, no hay necesidad de revisar los equipos después de su sustitución y no se requieren equipos externos complejos para la línea de vuelo o mantenimiento a nivel operacional

El Rafale está diseñado para requerir un mínimo de equipos de apoyo en tierra: está equipado con un sistema de generación de oxígeno a bordo (On Board Oxygen Generation System, OBOGS) y un sistema de líquidos de refrigeración de Coolanol y Nitrógeno de circuito cerrado para los sistemas electrónicos que no requiere mantenimiento. 

Entre otros de los detalles, no hay inspección completa del fuselaje requerido en toda la vida de servicio de la aeronave, limitado sólo a componentes muy específicos, todos ellos modulares (Shop Replaceable Units, SRUs). Este es un logro notable que reduce a niveles mínimos la cantidad de tiempo durante el cual el Rafale no está disponible. 

Los requisitos mínimos de repuestos permiten una reducción del inventario de repuestos y la muy alta coincidencia entre variantes mono y biplaza (declarada en un 95% por Dassault) minimiza el número de elementos de repuesto. Del mismo modo, la composición modular (Line Replaceable Unit, LRU) en los sistemas electrónicos de abordo como el SPECTRA, permite una rápida reparación. 

En resumen el Rafale se traduce en un avión extremadamente fiable y fácil de mantener y reparar, garantizando niveles de dotación reducida con mas detalles como por ejemplo, la apertura de la canopy habia un lado en lugar de hacia arriba facilita la remoción del asiento de eyección. 

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